El asesinato de una niña de 7 años paraliza una ciudad pakistaní tras unas protestas
Kasur, situado en el este de Pakistán se viste de luto tras el asesinato de una niña de 7 años que también fue violada. El asesino aún se encuentra en paradero desconocido.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La ciudad de Kasur, en el este de Pakistán, se encuentra hoy paralizada, con mercados cerrados y carreteras bloqueadas por cientos de personas que protestan por segundo día por el asesinato y la violación de una niña de 7 años, un día después de que dos manifestantes muriesen en enfrentamientos con la Policía.
Un portavoz de la Policía de Kasur, Mohamed Usman, indicó a Efe que esta mañana se produjeron algunos actos de vandalismo, como el destrozo de escaparates de tiendas, en protesta por la supuesta inacción de las fuerzas policiales ante los asesinatos de niños. "La situación es tensa, pero está bajo control", dijo Usman, mientras la principal protesta se mantiene frente al mayor hospital de la ciudad.
Las protestas se desataron ayer, un día después de que apareciera en la basura el cadáver de la niña, que había desaparecido el jueves de la semana pasada cuando se encontraba al cuidado de un tío mientras sus padres viajaban a Arabia Saudí de peregrinación religiosa. La aparición del cuerpo de la pequeña, que según los exámenes preliminares sufrió abusos sexuales antes de morir, desató la ira de los habitantes de Kasur, una ciudad que ha vivido varios episodios y escándalos de abusos a menores en los últimos años, con hasta siete casos recientes.
Las protestas, en las que algunos manifestantes pedían la ejecución pública del asesino de la niña, generó fuertes disturbios en la ciudadcon choques con la Policía. Otro portavoz policial, Khalid Iqbal, informó a Efe de que se han presentado denuncias contra tres policías por la muerte a tiros ayer de dos manifestantes que formaban parte de un grupo que presuntamente intentó asaltar las oficinas del comisionado adjunto de la ciudad, a lo que la Policía respondió con disparos.
Iqbal señaló que continúa la búsqueda del asesino de la niña, pero que hasta ahora no han tenido éxito. Shehbaz Sharif, jefe de Gobierno de la provincia del Punyab, donde se encuentra Kasur, visitó hoy a los padres de la niña y les prometió que los culpables "recibirán el mayor castigo", informó la administración provincial en su cuenta de Twitter.
En agosto de 2015 quedó al descubierto un escándalo de pedofilia en el que 19 menores fueron grabados en vídeos y fotografías por una red formada por 17 personas en el pueblo de Ganda Singh Wala, en el área de Kasur. En abril de 2016, un tribunal antiterrorista condenó a cadena perpetúa a dos acusados por ese caso. Tras ese escándalo, en marzo de 2016, Pakistán convirtió en delito los abusos sexuales a menores y la pornografía infantil, crímenes castigados con penas de hasta siete años de cárcel y que antes no eran sancionados.