Los cines en España, cada vez más en cada vez menos sitios

Ir al cine es un hábito clásico que, sin embargo, cada vez es más complicado para muchos españoles que deciden vivir lejos de la ciudad. No solo hay cada vez menos salas de dos o una pantallas, sino que los nuevos se concentran en núcleos urbanos que alejan las opciones de los urbanos.

Aunque aún no se disponen de las cifras de 2018, sí sabemos las del pasado año 2017. Según la Asociación para la Investigación de Medios de Comunicación (AIMC), el número de salas/pantallas se incrementó en comparación con al año anterior, de 3.492 a 3.534 con un total de 789.130 butacas. Estas salas están distribuidas en 699 cines.

¿Dónde encontramos la mayor cantidad de cines? En Cataluña, con 646, Andalucía, con 564, y Madrid, con 493.

La digitalización es también un hecho, es decir, que los cines ya casi no proyectan películas en celuloide clásico sino leyendo datos de un disco duro. La ventaja en esto es clara: el analógico se desgastaba poco a poco cada vez que la película era pasada por el proyector. El archivo digital se puede abrir ilimitadas veces y nunca pierde un ápice de su calidad. Además, físicamente un disco duro es mucho más pequeño que las bobinas de una película. Esto ha convencido a los cines: el 97 % de las salas están ya digitalizadas y este proceso se ha culminado completamente en 20 provincias. 3.427 de las salas tienen ya ese proyector digital, y los pocos que resisten son pequeños cines de sala única.

En las provincias con cines, los grandes complejos con multitud de salas van ganando terreno a esas pequeñas salas, que necesitan de más películas y más proyecciones para lograr aceptables resultados. Dichos complejos necesitan de una gran cantidad de espacio para sus instalaciones, normalmente fuera del núcleo de la ciudad pero a una distancia aceptable.

Sin embargo, un tirón de orejas para la distribución: las películas de directores que aún se atreven a rodar en analógico (Christopher Nolan o Quentin Tarantino) apenas encuentran sitio en España para su proyección dado que casi ningún cine tiene la mencionada maquinaria analogica, por lo que la versión original de la película tal cual fue rodada se hace extremadamente difícil de verla en nuestro país.