Pescado, queso o turrones: así están los precios de los alimentos a 24 horas de Nochebuena

Llegamos a la primera Navidad sin restricciones en dos años y con la cesta de la compra en máximos: pagaremos un 15,3% más de media por los alimentos y las bebidas no alcohólicas

Marta Ruiz

Publicado el - Actualizado

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Muchos hogares ya habrán cerrado el menú que pondrán a la mesa mañana por la noche, algunos han adelantado compras tirando de congelador para evitar las subidas de precios de última hora, pero otros muchos apuran a última hora para llevarse el género lo más fresco posible. 47 de los 60 componentes de alimentación y bebidas que recoge el INE se han encarecido más de un 10% en un año según el último dato correspondiente al mes de noviembre. Destacan las harinas y cereales con incrementos del 37,6%, la leche, la mantequilla y los huevos con subidas del 30%, 37,5% y 27% respectivamente. También pagamos un 25,9% más por el aceite de oliva y el azúcar se ha disparado un 50%. Servir carne a la mesa sale hoy un 26% más caro. A pesar de la elevada inflación en el 70% de los hogares prevé gastar lo mismo que el año pasado en la cena de nochebuena y la comida de navidad, según una encuesta de Funcas (Fundación de las Cajas de Ahorro), un presupuesto que cundirá un poco menos dando lugar a mesas un poco más austeras.

Con este marco general hemos vuelto al Mercado Maravillas de Madrid, donde David nos vuelve a atender detrás del mostrador de su carnicería y nos repite lo mismo que la semana pasada. "La ternera se está disparando y es imposible comprar en Mercamadrid solomillos para poner a un precio adecuado a mi clientela", afirma. "Yo lo tengo a 27 euros el kilo y en Mercamadrid está ahora a 32 euros el kilo más IVA. Para que salga rentable tengo que venderlo a 40 ó 43 euros y eso es inviable", nos dice David, que ha tenido que subir el cordero lechal un euro hasta los 17 por kilo, pero insiste en el esfuerzo que está haciendo para contener unos precios que han subido entre un 10 y 15% en las últimas semanas. No pocos de sus clientes han adelantado las compras para congelar.

José también ha incrementado esta semana el precio de las chuletillas de cabrito que vende en su carnicería de Jumilla (Murcia), lo ha hecho entre un 5% y un 8%, pero mantiene los solomillos rellenos. Lo mismo nos dice José Vicente carnicero en el Mercado Central de Valencia, "hemos querido ajustarnos cada uno para que el cliente se vaya contento". También precios contenidos en la carnicería de Ricardo en Burgos, aunque nos recuerda que con respecto a hace un mes " el solomillo de ternera ha subido entre 2 y 3 euros el kilo y el cochinillo lo ha hecho hasta en 15 euros la unidad"

El pescado se mantiene y el marisco al alza

El pescado y el marisco es lo que más se compra a última hora, como nos dice entre risas José Antonio desde su pescadería en el Mercado Maravillas de Madrid, "el sábado va a ser la guerra y las subidas de última hora dependerán del temporal y de lo que llegue a las lonjas". Nos dice este pescadero que la mayoría del género mantiene el precio con respecto a hace una semana salvo la merluza que ha subido 10 euros el kilo y 5 la lubina salvaje. En su mostrador podemos leer besugo a 74,99 euros el kilo, el rape a 35 euros y la lubina a 38 euros. En otros mostradores vemos la merluza a 39,80 euros el kilo o el langostino a 36 euros el kilo, la gamba y la cigala cuestan 48 y 68 euros, respectivamente. Otro pescadero de Madrid, David, también nos asegura que los precios no se han disparado a la espera de la última mañana de compras, pero sí destaca que el carabinero, la cigala o la almeja babosa cuestan 30, 100 y 40 euros más de su precio habitual en otras épocas del año. Por eso reseña que los clientes están animados pero controlando el gasto y llevándose menos cantidad de los productos más caros. En la pescadería de Carlos en Orense la almeja ha subido en tan sólo una semana de 24 a 35 euros y un 50% en el caso del centollo.

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Y también se buscan alternativas como constata Bautista en su puesto en el Mercado de Prosperidad de Madrid y nos pone un ejemplo: "el besugo lo puedes cambiar por lubina o por urta que están muy bien y más moderadas de precio". No se renuncia a la calidad, pero se ajusta la cantidad. Y es que a pesar de la inflación, en seis de cada diez hogares se van a servir productos del mar durante estas fiestas, según un estudio de una cadena de supermercados.

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Preguntado por el impacto de la inflación en su clientela, José nos dice que "siempre ha habido gente que va sobrada y gente que se aprieta el cinturón, pues ahora, estos segundos aún lo miran más", afirma antes de revelar que tiene el almacén lleno de pedidos esperando a ser recogidos.

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