La Bolsa conquista nuevos máximos del año en la confianza de un pronto fin de la guerra comercial
Los inversores miran con atención las negociaciones entre Deutsche Bank y Commerzbank con vistas a una integración
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El índice Ibex 35 ha cerrado su quinta sesión alcista consecutiva. Ha subido un 0,49 por ciento, hasta 9.534 puntos. Está en máximos del año. Ha sumado un 3 por ciento en cuatro días y roza el 12 por ciento de revalorización en lo que va de ejercicio. En los últimos días los inversores ha cotizado positivamente los avances en las negociaciones comerciales entre China y Estados Unidos.
Esta tarde, ya con los mercados europeos cerrados, se reunirán en Washington el presidente Trump con el viceprimer ministro chino, Liu He. Se considera una muy buena señal. Quizá esta reunión sea la antesala de una “cumbre” presidencial entre ambas potencias. Y los inversores de medio mundo respiran mucho más tranquilos ya que puede desaparecer uno de los condicionantes que más ha lastrado la economía mundial en los últimos meses, como es la guerra comercial y arancelaria.
Hasta ahí la parte buena, porque también ha habido algunas referencias menos optimistas. Ha sorprendido esta mañana la caída en los pedidos a fábricas en Alemania, se ha contraído un 4,3 por ciento, cuando se esperaba una pequeña mejora. El corazón económico de Europa continúan ofreciendo síntomas de enfriamiento. Hoy mismo los principales institutos económicos alemanes han rebajado su previsión de crecimiento del PIB gasta el 0,8 por ciento, un punto por debajo de la estimación anterior.
A pesar de esta pérdida de fuelle en Alemania, el Banco Central Europeo, -según las actas del último consejo que se han publicado hoy-, considera que a finales de año el crecimiento económico de la eurozona volverá a mostrarse sólido. La autoridad monetaria europea ha retrasado el horizonte de una subida de tipos de interés al menos hasta la recta final del ejercicio. El mercado, sin embargo, no descuenta una subida en el precio del dinero has bien entrado 2020.
El BCE, consciente de que las entidades financieras sufren en una situación como ésta de bajo crecimiento económico y tipos en cero, tiene en recámara medidas para aliviar la situación de los bancos, en especial nuevas inyecciones masivas de liquidez que comenzarán en septiembre. Los inversores creen, además, que el BCE rebajará en breve la tasa que aplica a los depósitos, es decir la penalización que tienen que pagar los bancos por colocar sus excesos de liquidez en el Banco. Actualmente es de un 0,4 por ciento. El BCE cobra cada año 7.000 millones de euros a las entidades bancarias por este concepto. El próximo consejo del BCE se celebrará la semana que viene.
Hoy han subido en Bolsa los bancos, en especial Bankia y Caixabank. Sin salir del sector financiero, los inversores miran con atención las negociaciones entre Deutsche Bank y Commerzbank con vistas a una integración. En las últimas horas ha salido un nuevo actor a escena. Parece que la entidad italiana Unicredit podría estar interesada también en el Commerzbank.
Hoy el Tesoro ha vuelto a los mercados en busca de financiación. Ha vendido 3.500 millones en bonos a tres años y obligaciones a diez. La rentabilidad en el plazo más corto ha ahondado en territorio negativo. Estos títulos ofrecen un rendimiento del menos 0,24 por ciento, frente al menos 0,17 de la subasta anterior. La rentabilidad de la deuda a diez años ha subido del 1,10 al 1,12 por ciento.
El Tesoro también ha colocado deuda a diez años indexada a la inflación, con un rendimiento negativo del menos 0,32 por ciento. La semana que viene están previstas las dos últimas subastas de deuda de este mes de abril. El martes, día 9, letras a 3 y 9 meses y el jueves, bonos y obligaciones.