Los sólidos datos de empleo de EEUU hacen dudar a la Bolsa, al euro y al mercado de bonos

Las cifras de empleo de Estados Unidos han supuesto todo un "susto" para los mercados. La tasa de paro se ha mantenido en el 3,8 por ciento. La economía estadounidense creó el mes pasado 336.000 empleos no agrícolas, cuando se esperaban no más de 170.000. Esas sólidas cifras del mercado laboral presionan a la Reserva Federal para que vuelva a subir el precio del dinero antes de que concluya el año. Su próxima reunión está prevista para finales de este mes. Por su parte los pedidos a fábricas de Alemania han crecido un 3,9 por ciento en agosto, frente a la caída del 11,7 por ciento en el mes anterior. Es un dato alentador. Pese a ello, el gobierno alemán cree que la economía del país se contraerá un 0,4 por ciento al cierre de este año.

Así las cosas, el índice Ibex 35 sale del viernes en 9.235 puntos, con una mejora del 0,85 por ciento. En algunos momentos ha tenido que ir a buscar apoyo hoy a los 9.100 puntos. La Bolsa ha perdido un 2 por ciento en esta semana. Se coloca en su niveles más bajos desde el pasado mes de mayo. En lo que va de año acumula todavía una revalorización del 12 por ciento. Los bancos han operado una vez más mejor que la media del mercado. BBVA pagará dividendo el próximo miércoles. Son 16 céntimos de euro brutos por acción. La estrella del día ha sido Deóleo, que se ha disparado un 8 por ciento entre insistentes rumores sobre una posible venta de la compañía al grupo Iffco de Emiratos Árabes por 400 millones de euros. Deóleo cuenta con marcas tan conocidas como Carbonell o Koipe.

Sigue la tregua en el mercado del petróleo. El crudo del Mar del Norte ha pasado en pocos días de 95 a 84 dólares por barril. Pesa la impresión de que se está enfriando la economía mundial lo que reduce la demanda de crudo y carburantes. El próximo jueves se conocerá el informe mensual de la OPEP. Sigue muy tenso el mercado secundario de deuda pública. La rentabilidad de las obligaciones españolas a diez años supera ya el 4 por ciento. El rendimiento del “bund” alemán roza el 3 por ciento. La rentabilidad de los bonos de EEUU al mismo plazo es del 4,8 por ciento, no está muy lejos de sus niveles más altos de los últimos 16 años.

La agenda financiera de la próxima semana viene marcada por los datos definitivos de inflación de Europa y de Estados Unidos. Son las cifras correspondientes a septiembre. El IPC de Alemania se conocerá el miércoles, el de EEUU el jueves y el de España se conocerá el viernes. Las expectativas no son malas. Según el dato adelantado el IPC de la zona euro se encuentra en 4,3 por ciento en tasa general y en el 4,5 en la subyacente. Ambas cifras son mejores de las que esperaban los analistas.

Además a lo largo de la semana se conocerán las actas de las últimas reuniones de los consejos de gobierno de los bancos centrales del Reino Unido, Estados Unidos y la zona euro. La Reserva Federal y el Banco de Inglaterra hicieron una pausa y mantuvieron sus tipos de interés de referencia en el 5,50 y en el 5,25 por ciento, respectivamente. Por su parte, el BCE elevó otro cuarto de punto el precio del dinero, hasta el 4,50 por ciento. Y al final de la semana comenzarán a conocerse los resultados empresariales del tercer trimestre en Estados Unidos.