Así fue el Congreso del PP de 2008 en Valencia que cambió el devenir político de Santiago Abascal

SANTIAGO ABASCAL (43 años - casado - 4 hijos)

Al cumplir 18 años se afilió al Partido Popular. Desde ese momento fue enlazando cargos como presidente de Nuevas Generaciones en Euskadi, parlamentario autonómico y secretario de Educación en el País Vasco, hasta que decidió abandonar la formación en 2013, después de acusara a Mariano Rajoy de traicionar los principios de la formación. La familia de Santiago Abascal fue perseguida por ETA en los años más sanguinarios de la banda terrorista. Esto hizo que se alineara con el sector más crítico del PP en el País Vasco. El Partido Popular en esos años fue el apoyo que permitió a Patxi López convertirse en presidente del País Vasco en 2009.

En esta legislatura Abascal no consiguió escaños en el Parlamento del País Vasco, y fue uno de los primeros políticos en pedir que se acabara dicho acuerdo político, aunque declaró en el año 2011 que otras veces pidió “salvaguardarlos tapándose la nariz”.

Llega 2008 y con él el famoso Congreso del Partido Popular en Valencia, donde fue muy crítico con la figura de Mariano Rajoy. Esta posición le llevó a ser “fichado” por la entonces presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, que en 2010 le nombró presidente de la Agencia de Protección de Datos, esta institución desapareció en el año 2012 a causa de los recortes. Ya en 2013, poco antes de su desvinculación con el partido de la calle Génova, Abascal ocupa el cargo de gerente en la Fundación para el Mecenazgo y el Patrocinio Social. En enero de 2014 Abascal presenta junto a Ortega Lara su nuevo partido Vox, prometiendo un cambio en el modelo territorial en contra del “fracasado” modelo de las autonomías”. Esta idea ha acompañado al ideario del partido hasta nuestros días. Desde el comienzo del partido se ha emitido un mensaje muy claro contra el independentismo catalán.

En el año 2014 señaló que “Artur Mas sería destituido, procesado y encarcelado” y un año después, 24 meses antes del referéndum ilegal del 1 de octubre, pidió la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña. Pasaron los años y la crisis del independentismo catalán se iba agravando, por ello en 2018 Vox se presenta, de nuevo, a la opinión pública con un gran mitin en Madrid, más concretamente en la Plaza de Toros de Vistalegre. En esta ocasión Abascal y su equipo de confianza defendieron a ultranza la unidad de España pidiendo la ilegalización de toda aquella formación o grupo político que la quiera romper.

A partir de ese momento Vox ha ido cogiendo fuerza dentro de la opinión pública de nuestro país. Un claro ejemplo fueron las pasadas elecciones autonómicas en Andalucía, donde las encuestas daban a Vox entre 2 y 3 escaños y acabaron consiguiendo 12. Este resultado permitió acabar con la presidencia del Partido Socialista en esta tierra, que se prolongó durante casi 36 años.

A principios del mes de febrero, Abascal lidera la presencia de Vox en la ya conocida como “Manifestación de Colón”, un acto que congregó a miles de ciudadanos en el centro de Madrid para reivindicar la unidad de España y pedir a Pedro Sánchez la convocatoria de elecciones generales. Por primera vez se vió a Abascal en un acto conjunto con los líderes del PP y Ciudadanos, Pablo Casado y Albert River, con los que está obligado a sentarse a negociar si entre ellos suman los escaños suficientes para forma un Ejecutivo alternativo al de Pedro Sánchez.