La exdiputada de la CUP que se negó a contestar a Vox ante el Supremo declarará mañana por desobediencia

Reguant se negó a contestar en el TS a las preguntas formuladas por la acusación popular de Vox durante el juicio por el proceso independentista

La exdiputada de la CUP que se negó a contestar a Vox ante el Supremo declarará mañana por desobediencia

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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La exdiputada de la CUP Eulàlia Reguant comparecerá mañana, a partir de las 11.30 horas, ante la titular del Juzgado de Instrucción número 10 de Madrid por un presunto delito de desobediencia. Reguant se negó a contestar en el Tribunal Supremo a las preguntas formuladas por la acusación popular de Vox durante el juicio por el proceso independentista en Cataluña.

La jueza de Madrid investiga tanto a Reguant como al exdiputado de la misma formación Antonio Baños, después de que el Tribunal Supremo dedujera testimonio por no cumplir la obligación que tienen los testigos de contestar a todas las partes.

La declaración de Baños estaba inicialmente prevista para este martes, pero por motivos laborales se ha aplazado hasta el 18 de marzo, día en el que comparecerá por videoconferencia.

El turno de Reguant será mañana, quien acudirá a los Juzgados de Plaza de Castilla de Madrid apoyada por una delegación de ERC. La comitiva que se concentrará a las puertas de la sede judicial la integrarán una decena de diputados y senadores del partido republicano, según ha informado la propia formación política.

Esta causa se abrió después de que el alto tribunal instara a que un juzgado ordinario investigara a Reguant y Baños por el delito de desobediencia, por el que podrían enfrentarse a un año de prisión, por esta negativa. Asimimo, la Sala de lo Penal del Supremo les impuso una multa de 2.500 euros a cada uno de ellos, que fueron sufragados con aportaciones de ciudadanos a la denominada caja de solidaridad.

OBJECIÓN DE CONCIENCIA

El pasado 14 de febrero, en rueda de prensa, ambos investigados anunciaron que alegarían ante la jueza de Madrid objeción de conciencia por la existencia de una "vinculación de la judicatura con el franquismo" y con Vox, quien propuso sus testificales.

Según Reguant, su objetivo fue y sigue siendo "mostrar cómo la presencia de Vox no se podía entender como una anomalía, sino como un elemento más de este engranaje del Estado".

Así, dio por hecho que tanto ella como su compañero de partido irán a juicio porque no cree que un juez instructor "contradiga" al Supremo, pero ha asegurado que asumirán las consecuencias de su negativa a responder a Vox.

OCTAVA SESIÓN DEL JUICIO POR EL 'PROCÉS'

Todo ocurrió el 27 de febrero de 2019, en la octava sesión del juicio por el 'procés'. El primero en negarse fue Baños que comunicó al tribunal que no contestaría a Vox "por dignidad democrática y antifascista", pese a que el presidente del tribunal, que juzgó a 12 líderes independentista, Manuel Marchena le advirtiera de que el derecho a no declarar sólo lo tienen los acusados, así como de las posibles consecuencias penales.

El magistrado incluso llegó a proponerse como interlocutor para que el testigo contestara a la Sala y no al abogado de la acusación popular y así tratar de reconducir la situación, pero Baños también rechazó su propuesta.

Después llegó Reguant, quien pidió poder declarar en catalán y comunicó también su intención de negarse a contestar a Vox, partido al que definió como "de extrema derecha, machista y xenófobo".

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