El Gobierno abre la puerta a permitir paseos y ejercicio físico en la calle a partir del 2 de mayo

Los ciudadanos podrán salir a hacer deporte y dar paseos con quienes convivan si los contagios no se incrementan

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este sábado que si las salidas con niños y niñas menores de 14 años no provocan un aumento de contagios, a partir del 2 de mayo los ciudadanos podrán salir a hacer deporte y dar paseos con quienes convivan.

Sánchez, en una comparecencia desde el palacio de la Moncloa, ha pedido a las familias que a partir de mañana, cuando un adulto salga a la calle con los más pequeños y dentro de las condiciones establecidas, actúen con responsabilidad y con "la máxima seguridad".

Cumplir tales requisitos "a rajatabla" es "importantísimo" para que no se contagien quienes salgan, y así, no contagien a los demás.

El presidente ha dejado claro que si esta "prudencia" queda corroborada, algo de lo que no tiene duda según ha dicho, habrá sucesivas medidas de alivio, y una de ellas será que a partir del 2 de mayo, si la propagación sigue contenida, se podrá salir a hacer actividades físicas y a dar paseos.

Sánchez ha pedido a las unidades familiares con hijos menores de 14 años que a partir de mañana, cuando salgan a la calle, practiquen la "máxima responsabilidad" y la "máxima seguridad" porque, si este "alivio" o "pequeña conquista" en la batalla al virus no provoca un aumento de los contagios, la "desescalada" se irá desplegando.

En ese caso, a partir del 2 de mayo las personas que quieran salir a hacer deporte, podrán hacerlo, pero siempre y cuando vayan solos; del mismo modo, quien conviva con otra persona, podrán salir juntos a dar un paseo.

Esto es lo que ha anunciado el presidente, aunque no ha dado más información y se ha remitido a la orden del Ministerio de Sanidad que se publicará en el BOE en próximos días con los detalles de ambas prácticas.

Sánchez volverá a reunirse con los presidentes autonómicos este domingo y hablarán sobre los proyectos de "desescalada" de cada uno, y el lunes los responsables técnicos ultimarán el plan que el Gobierno presentará el martes en cuanto lo apruebe el Consejo de Ministros. El propio Sánchez será quien lo explique públicamente.

Bajo la coordinación de la vicepresidenta cuarta, Teresa Ribera, y del ministro de Sanidad, Salvador Illa, ese plan de "desescalada" será "gradual, asimétrico y coordinado" y abarcará el mes de mayo, y quizá el de junio.

Las actuaciones se ajustarán a "un cuadro de mandos", ha afirmado, y no conllevarán una recuperación de la actividad económica o comercial "de golpe", sino que se desplegarán "por etapas" y a diferentes velocidades según las circunstancias sanitarias del territorio en que se apliquen.

No todas las autonomías están afectadas con la misma intensidad por la pandemia, y de hecho hay territorios en los que no ha habido un caso positivo, como la isla canaria de La Graciosa, pero Sánchez ha insistido en que los riesgos de que llegue el virus no se han disipado y que, en cualquier caso, la prioridad es atender las circunstancias sanitarias de cada zona.

El presidente ha defendido que la "máxima coordinación" la siga dirigiendo el Ejecutivo y ha negado que se estén recentralizando competencias. El Gobierno, por tanto, se encargará de evaluar cada paso y cada medida de acuerdo con unos parámetros "objetivos".

Los parámetros serán la medición de la fortaleza de los sistemas de salud de cada comunidad, el número de camas UCI, la capacidad de los servicios de atención primaria, el grado de vigilancia epidemiológica, incluidas las pruebas PCR; y la facilidad para identificar personas contagiadas y los recursos para aislarlas. Todo ello sin obviar las medidas de protección.

Al igual que en comparecencias anteriores, el presidente ha apelado a la unidad de acción en la UE y en España.

Pese a las vacilaciones de los Estados miembros de la Unión al principio, va ganando peso una réplica a la crisis del coronavirus "conjunta, solidaria y contundente".

En España, Sánchez quiere que la unidad sea similar. Ha pedido pactos en todos los niveles de la administración, "gobierne quien gobierne" en autonomías, ayuntamientos o diputaciones, pues "el mayor de los errores es ahora mismo el de la división".