Ignacio Cembrero: “Ataques yihadistas como el de Torre Pacheco son imposibles de prevenir”
El periodista y escritor experto en yihadismo analiza en COPE los detalles del ataque en el municipio murciano y la realidad del riesgo terrorista que vive España
Publicado el - Actualizado
3 min lectura
Parece que se disipan todas las dudas. El ataque que se produjo el pasado 17 de septiembre contra una terraza de un restaurante en Torre Pacheco (Murcia) fue un atentado yihadista. La tesis sobre la que trabajaba en un principio la Guardia Civil, y que trataban el suceso como un atropello accidental, se desvaneció en poco tiempo.
Todos los indicios con los que ahora trabajan los investigadores sitúan a este ciudadano marroquí de 27 años como un 'lobo solitario'. Abdellah Gmara, que llegó a España con 12 años como menor extranjero no acompañado, lo tenía todo preparado para revertir en muerte la tranquilidad del municipio murciano.
En el coche utilizado por Gmara para perpetrar su ataque los agentes de la Guardia Civil encontraron tres notas en las que hablaba de “atentado terrorista” y del “islam”, además de la declaración de fe islámica: “No hay más Dios que Alá y Mahoma es su profeta”. Abdellah Gmara se llevó por delante la vida de dos personas e hirió a otras cuatro.
“El ataque sigue todos los mimbres de un ataque yihadista por varios motivos: una reciente religiosidad del agresor y también el hecho de que estaba rasurado”. Así de contundente se ha mostrado Ignacio Cembrero (Madrid, 1954), periodista y escritor experto en el mundo islámico y en yihadismo, durante una conversación mantenida con COPE, en la que –además– ha matizado que “sigue la pauta de ser un lobo solitario porque no tenía ni cómplices ni gozó de ningún tipo de ayuda. Utilizó como arma lo que tenía a su alcance, que era su propio vehículo”.
Cembrero, que se ha mostrado sorprendido por el “escaso eco mediático” que se le ha dado al ataque, ha manifestado que “hay algunos elementos que hacen pensar a los investigadores que el yihadista Abdellah Gmara también tenía algunos problemas mentales”, aunque en cualquier caso este matiz “no rebajaría que el caso se siga tratando como un ataque yihadista”.
Sobre este caso nos podemos llegar a preguntar qué ha podido fallar o en qué se está fallando a la hora de integrar a estos ciudadanos para que terminen convirtiéndose en brutales asesinos. Según el experto, se sigue “luchando contra la radicalización con distintos planes” que se desarrollan “tanto a nivel estatal como en algunas comunidades autónomas”.
El riesgo de acciones de 'lobos solitarios' ha aumentado en España por el nuevo escenario mundial tras el triunfo de los talibanes en Afganistán. En el caso de Abdellah Gmara, su radicalización se aceleró en muy pocas semanas. Cembrero, sin embargo, opina que en España “nos encontramos en un nivel muy alto de riesgo” que cree “excesivo”. Para el experto, “la amenaza persiste, lo hemos comprobado con el caso de Torre Pacheco, pero el nivel de amenaza se ha reducido durante los últimos años. Con la desaparición del Estado Islámico en Siria y en Irak creo que el nivel de alerta en occidente, y concretamente en Europa y en España, ha decaído”.
Ignacio Cembrero sitúa el verdadero peligro para la importación de terrorismo yihadista para Europa y para España en el Sahel “donde hay Estados endebles como Mali, Chad, Burkina Faso o Níger azotados por el terrorismo, y desde donde se podría exportar el terrorismo a Europa”. Respecto a la nueva realidad geopolítica en Afganistán, Cembrero sostiene que “la gran pregunta” para la que dice “no tener respuesta” es sobre si van a crear en Afganistán “un nuevo santuario para el yihadismo como lo ha sido el Estado Islámico en Siria y en Irak, o como lo fue el Afganistán talibán hasta el año 2001. Tiendo a pensar que no”.