El arma encontrada en casa del sospechoso de Susqueda no fue la usada en el asesinato

El arma encontrada en una de las propiedades de Jordi Magentí, el sospechoso del crimen de Susqueda, no es la que se usó en el asesinato de Marc y Paula. Según ha podido saber COPE en fuentes de la investigación, se trata de una pistola del calibre 22 mientras que la del crimen sería de 9mm. Los mossos han encontrado también diversas plantas de marihuana, propiedad del hijo del detenido. Por ello se le ha imputado un presunto delito contra la salud pública. Con esa acusación ha quedado este miércoles en libertad por orden del juez de instrucción número 2 de Santa Coloma de Farners. Sin embargo, los investigadores trabajan con la idea de que no sólo era una cuestión del hijo. Se investiga ahora si ambos se dedicaban al tráfico de drogas y si el hijo actuó como encubridor del crimen de los dos jóvenes en el pantano. 

Los Mossos d'Esquadra localizaron este martes en el registro de la vivienda de la madre del acusado esta arma corta. Es un calibre muy utilizado en el tiro olímpico y en armas deportivas, especialmente conocida en el sur de la vecina Francia. "Yo no he hecho nada. Me están queriendo colocar un muerto que yo no he matado", aseguró Magentí, dirigiéndose a voz en grito hacia los numerosos informadores que se habían concentrado tras el cordón policial frente a la casa de su tío en Anglès (Girona).  Tras cometer el doble asesinato, los mossos sospechan que el detenido, que frecuentaba el pantano de Susqueda para ir a pescar, hundió los cadáveres de la pareja en este embalse del río Ter, cargándoles con mochilas llenas de piedras, así como el kayak con el que iban a hacer una excursión y su coche.

Precisamente, los Mossos d'Esquadra tratan de descubrir el móvil de este doble crimen, ya que no consta ningún vínculo previo entre el detenido y la pareja de jóvenes que estaban acampados en el pantano de Susqueda, situado a media hora en coche de Anglès. La policía autonómica está convencida, a pesar de que no aparece el arma homicida, de que el caso está resuelto y bien atado. Hasta el punto de que no contemplan más opción que el juez envié a prisión al sospechoso. Eso lo conoceremos mañana jueves que es cuando se cumplen las 72 horas desde la detención. Entre el material probatorio que manejan destacan las llamadas telefónicas registradas o la ubicación del coche en el lugar del crimen el día 24 de agosto. Agentes de la unidad científica de los mossos también están analizando ese vehículo todoterreno de color blanco que supuestamente conducía Magentí el día del crimen, junto al pantano de Susqueda, lo que fue clave en su posterior detención. Según fuentes de la investigación, ese vehículo es el que algunos testigos sitúan en la zona del pantano, no sólo el día del crimen, sino en varias ocasiones en los últimos meses.

Los dos jóvenes, que estaban de vacaciones en una zona recóndita de Susqueda, desaparecieron el 24 de agosto pasado, si bien los cadáveres no fueron localizados hasta el 26 de septiembre, medio hundidos en el pantano.