Se busca presidente para el Tribunal Supremo

Llamada va, llamada viene. Se intensifican las conversaciones entre los dos bloques, pero de momento no hay consenso. Intentan desbloquear el atasco de cara al pleno del próximo lunes y nombrar Presidente del Supremo de una vez. Estudian diferentes posibilidades para desencallar. Siete candidatos sobre la mesa pero dos principales, Pilar Teso, favorita de Moncloa, que busca una mujer ante todo, y Pablo Lucas, propuesta conservadora y considerado progresista. En todas las votaciones el resultado fue diez contra diez. Se necesitan doce votos. Los otros nombres son Ana Ferrer, también favorita, y Ángeles Huet por la parte progresista, y Antonio del Moral, Esperanza Córdoba y Carmen Lamela por la parte conservadora.

Fuentes jurídicas de distintos tribunales y también algunas asociaciones judiciales, muestran su perplejidad por este bloqueo. Incluso hay quien habla de estupor. Lo positivo es que no ha habido un acuerdo político entre PSOE y PP para elegir Presidente, manifiestan a COPE, pero consideran que los vocales se comportan de acuerdo al bloque político que les ha nombrado. "No son capaces de sortear la cuestión política".

Este atasco confirma la perversidad del sistema, dicen a COPE las fuentes consultadas. No es comprensible que los 20 vocales no puedan cumplir con su primer cometido, elegir Presidente. Da la sensación de veto político, manifiestan, especialmente en el caso de Pablo Lucas, un magistrado muy bien considerado por gran parte de la carrera judicial. Al menos, eso es lo que perciben. Sería escandaloso, señalan, que no eligiesen Presidente antes de la apertura del Año Judicial, el 5 de septiembre.

Además de este escollo, importante escollo, el CGPJ tiene que hacer frente a más de un centenar de nombramientos. Plazas vacantes a causa de la reforma exprés de Pedro Sánchez que impidió al anterior Consejo hacer nombramientos para obligar al PP a la renovación. 101 en la justicia ordinaria: 28 en el Supremo, lo que supone un 30% de la plantilla, 2 en la Audiencia Nacional, 40 en el Tribunales Superiores de Justicia y 31 en la Audiencias Provinciales. Y 27 plazas vacantes en la jurisdicción militar. En los próximos meses habrá una plaza muy golosa como es la presidencia de la Sala Penal del Supremo, que ostenta Manuel Marchena. Su mandato de 10 años termina y no puede repetir.