“Embustero y analfabeto”, la reveladora frase de Pérez-Reverte sobre un político español
El escritor Arturo Pérez-Reverte relata la disparatada conversación que mantuvo con un taxista
Madrid - Publicado el - Actualizado
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“Me pasó ayer con un taxista. Había estado oyendo por la radio a un político embustero, analfabeto y sin complejos, especie cada vez más abundante”. Así dice el último artículo del escritor Arturo Pérez-Reverte en la revista XLSemanal donde revela una extendida charla que tuvo en un taxi que tomó.
El conductor parece, según cuenta Pérez-Reverte, que era muy hablador. Esto indica que puede ser muy bueno o muy malo. En este caso, descubrió un gran “monólogo” que ni el propio humorista Leo Harlem lo hubiera escrito.
“Me tocó un conductor locuaz, a veces son un martirio y otras una bendición, y al poco estaba yo fascinado por un monólogo que para sí lo habría querido el gran Leo Harlem”, escribió. El conductor tenía dos hijos, dos jóvenes de 16 años y de 14. Había terminado de hablar con ellos hace unos minutos y estaba tan “desesperado” como si le estuvieran arrancando una muela.
“El relato que me hizo entre Atocha y Diego de León fue una antología de hijos y padres, un retrato sociológico perfecto en el que cualquiera que haya tenido o tenga vástagos de esa edad puede reconocerse y reconocerlos”, comentó el escritor.
El taxista decía que su hija era “clásica de manual”, de esas jóvenes que buscas en Internet “hija adolescente” y sale su foto. “Digo por ejemplo que algo es rojo, y sin ni siquiera mirarlo me dice que no tengo ni idea de colores. Luego argumenta como una catedrática, hasta volverme loco, por qué lo que yo veo rojo no es rojo. Y después de ponerme la cabeza hecha un bombo, acaba diciendo que tal vez sea de color burdeos”, detallaba el conductor.
El hijo era un “muchacho clásico” también. “Le digo que algo es rojo y que es importante diferenciar los colores, y me mira como si yo fuera gilipollas y comenta ‘si tú lo dices…’ antes de seguir dándole al mando de la consola”, aseguraba el taxista.
Sin embargo, uno de los retos más difíciles para este taxista, según le comentaba al escritor, es cuando le pedía a sus hijos que bajasen a comprar algo al supermercado. Si se lo preguntaba a su hija, esta le respondía que “había quedado con amigas”. Y si se lo pedía a su hijo, este le decía “vale”, pero tenía que sugerirle que se cambiara de ropa para bajar a al calle.
“Le juro a usted que si no los mato es porque no tengo tiempo”, comentaba desesperado este conductor.
Cuando el escritor llegaba a su destino final, el dramaturgo le intentó consolar con un “La vida del taxista es dura”. El conductor le miró a través del retrovisor y le responde “¿Dura, dice usted?… Para duro lo que tengo yo en casa”, sentenció.
Una historia que bien se puede asimilar a la de cualquier español. Sin embargo, hay un detalle que ha llamado la atención a los seguidores de Pérez-Reverte. El escritor comentaba que el taxista comenzó hablándole de un político, alguien que el dramaturgo definía “embustero, analfabeto y sin complejos”. Apostigaba además que era una “especie cada vez más abundante”. Muchos tuiteros han comentado esta frase en la red social Twtter preguntándose de quién podría tratarse. Algunos, simplemente, adjudican esta frase a todos. Y otros, se sienten totalmente identificados con el taxista.