¿Por qué el PNV pone a Sánchez como condición respetar los Presupuestos?
El aumento del 32% del presupuesto vasco y la potente inversión ferroviaria del Estado, claves en el apoyo del PNV
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Los Presupuestos Generales del Estado fueron aprobados la semana pasada en el Congreso gracias al apoyo del PNV. Los cinco diputados del partido vasco fueron fundamentales para que el PP pudiera sacar adelante un balón de oxígeno que ahora se puede volver en su contra por la moción de censura.
Este jueves se produce el debate esta misma moción, que el grupo socialista ha presentado ante la cámara del Congreso como respuesta a la sentencia del caso Gürtel que condena al Partido Popular como responsable civil de la corrupción de algunos sus ayuntamientos municipales en Madrid y la Comunidad Valenciana. En su discurso programático, Pedro Sánchez ha reprochado a Mariano Rajoy que su política económica es "deficiente", pero a la vez apuesta por ser presidente del Gobierno manteniendo los Presupuestos del Partido Popular.
Se trata de un guiño al PNV, que tiene en su mano si la moción prospera o fracasa. Pero, ¿por qué es tan importante para el PSOE gobernar con los Presupuestos Generales del Estado de los conservadores? ¿Qué beneficios conseguirá el PNV si finalmente se terminan de tramitar en el Senado?
1) Inversión del 32%: La primera razón es la extraordinaria subida en la inversión que el PP prometió a las Comunidades Autónomas en abril.
Cristobal Montoro anunció que el PNV tendría un 32% de presupuesto más que el año pasado, 509 millones de euros, lo que contribuiría a impulsar la construcción de los tramos pendientes del AVE en Euskadi. A esta medida se unen los 36 puntos de inversión que firmaron el año pasado PP y PNV, que incluían desde pequeñas actuaciones en terminales logísticas hasta obras en estaciones de la vía férrea.
2) La subida de las pensiones y el factor de sostenibilidad: Otro de los logros que se arroga el PNV es la subida de las pensiones para 2018 y 2019 según el IPC anual. La subida desde 2014 a 2017 era del 0'25%, y el Gobierno ya había decidido sacar adelante una ley de PGE para que se incrementaran del 1'5% de las pensiones de menor cuantía al 3% de las pensiones mínimas. Con la contribución del PNV se suma un 1'6% al montante total.
La segunda medida era el retraso en la aplicación del factor de sostenibilidad hasta 2023, que une el cobro de la pensión a la esperanza de vida del jubilado, reduciendo la cuantía final. El Gobierno esperaba que esta medida entrara en vigor en 2019, pero la presión del PNV ha contribuido a que el factor no se ponga en acción todavía.
3) El artículo 155: Aitor Esteban afirmaba ayer que la aprobación de su partido a los presupuestos “permitirá” que el artículo 155 se anule de forma “inminente”. “Pronto se formará un Govern en Catalunya sin mácula”, pronosticó el dirigente vasco.
Y es que la vigencia de este artículo ha sido el argumento que ha esgrimido el PNV para condicionar las negociaciones con el PP y negarle su voto a los PGE durante meses. Sin embargo, el nombramiento de Quim Torra como president de la Generalitat catalana abre un nuevo horizonte en el que se espera que pronto se desactive el 155.
En esta situación, el PNV pretende proyectar la imagen de sí mismo como un organismo de “control” al Gobierno, y un agente imprescindible para lograr una solución dialogada para Cataluña.