La UDEF vuelve a Cataluña a por el dinero del procés

La Policia levantó literalmente de la cama al matrimonio Pujol- Ferrusola en octubre de 2015 cuando descansaban junto a su hijo Jordi Pujol Junior en su domiclio de Barcelona. Aquel despliegue de más de 200 policias hizo ver sin tapujos a todo un símbolo del nacionalismo catalán. “Quién coño era eso de la UDEF”. Asi lo exclamó el patriarca de la familia al saber que los agentes de la Unidad contra la Delincuencia Económica y Fiscal seguían los pasos a varios miembros del clan Pujol por un presunto delito de blanqueo. Casi tres años después la UDEF vuelve a Cataluña tras la pista del dinero del procés.

El sorprendido en esta ocasión es el flamante president Quim Torra. Por encima de los 29 detenidos por participar presuntamente “en una trama de corrupción en subvenciones de la Diputación de Barcelona”, como leemos en la nota oficial del ministerio del Interior, destaca, sin duda, un nombre. No está ni detenido ni investigado. Es Francesc de Dalmases, parlamentario de Junts per Catalunya. En un alarde de malabarismo argumental, Interior informa de la detención de quien puede ser una pieza destacada del entramado, Victor Terradellas Maré, advirtiendo de que es “socio del Dalmases Thio.”

Este diputado desde el 21-D, director de las revistas independentistas Catalan International View y ONGC, es parte muy destacada, según fuentes políticas y policiales, de la camarilla que acompaña al president Quim Torra o al huido Puigdemont en muchas de las decisiones que desafían la legalidad y la Constitución. Para colmo es pieza decisiva en la creación y mantenimiento de las dos asociaciones implicadas en la operación Estela puesta en marcha ahora por la UDEF: CATmón e IGMAN Acció Solidaria.

Esas dos firmas, cuyas sedes se encuentran casualmente en el mismo portal que Òmnium Cultural (calle Fonollar 14 de Barcelona), “son los pulmones en el engranaje que engrasa el procés”, afirma a COPE una fuente de la propia investiagación. Y añade: “El corazón estaría en otra de las marcas investigadas, la imprenta Discatimat S.L.”

La policía constata cómo el dinero que debería ir destinado a ayuda a países en vías de desarrollo llegaba a esas fundaciones y otras entidades sin ánimo de lucro para proyectos que nunca se concretaron. Policía y Fiscalía Anticorrupción hablan de unos 2 millones de euros, pero las fuentes consultadas ya nos adelantan que la cantidad final puede puede ser muy superior, por encima de los 10 millones. El juez señala a “empresas creadas expresamente para el cobro de las subvenciones, informes finales copiados literalmente de Internet, facturas falsas...”

Y es que “el dinero de la subvenciones transitaba, presuntamente, de forma anómala entre cuentas bancarias de IGMAN, CATmón y la sociedad mercantil Disctimat S.L. para ser reintegrado en efectivo o destinado a sufragar los gastos de la actividad del entramado criminal o para terminar en cuentas personales de los investigados.” Es la versión de los investigadores.

Como suele ocurrir, una cosa es lo que se dice y otra lo que se investiga. Los agentes devoran ahora documentos intervenidos en una veintena de registros y en las intervenciones telefónicas y telemáticas ya practicadas para confirmar si, tal como creen, parte del dinero de las subvenciones irregulares ha servido para subvencionar las actividades presuntamente ilegales que lidera el huido Puigdemont. Sería la “Estela” del procés.

Gürtel: un trabajo de la UDEF que tapa otro

El president Torra se queja de que la macrooperación se haya montado para tapar la sentencia de la Gürtel que condena al PP por haberse financiado ilegalmente. La coincidencia de estas dos noticias de calado sorprendió a la propia Policia. Un antiguo responsable de la Unidad Policial contra la Delincuencia Económica se lamenta: “Qué pena que un éxito policial como es la sentencia de Gürtel (obra de la UDEF) reste visibilidad a este éxito inmediato”. La operación en Cataluña.

El impresionante operativo policial de Estela, con unos 500 agentes de distintas unidades (UDEF, GEO, guías caninos, Unidades de Intervencion Policial, grupos técnicos...), se puso en marcha de acuerdo con el juez instructor “hace casi un mes”, según un mando que participó en esta decisión y fijó la fecha de “la explotación” del caso. La publicación de la esperada sentencia de la Audiencia Nacional, justo cuando se desarrollaba la operación Estela, restó logicamente protagonismo al dispositivo policial y judicial. Máximos responsables de policia judicial y de UDEF siguieron sobre el terreno el desarrollo de las detenciones y los registros.

La vuelta de la UDEF a Cataluña supone, además, la puesta de largo de la nueva cúpula de esta unidad tras el nombramiento de su ultimo jefe, el comisario Fernando Moré. Relevó en el cargo al actual jefe superior de Policía en Galicia, Manuel Vázquez, que dirigió una etapa de máxima actividad no exenta de polémicas por las interferencias protagonizadas desde la antigua Dirección Adjunta Operativa (DAO) del cuerpo.

La sentencia del caso Gürtel sirve para recordar estos días a otra referencia dentro de UDEF: Manuel Morocho, responsable directo de las pesquisas sobre el caso ahora sentenciado. Este inspector-jefe llegó a denunciar ante la comisión parlamentaria que investigó la presunta financiación irregular del Partido Popular las presiones “desestabilizadoras” que sufrió durante su trabajo. El comisario Moré ha realizado cambios al frente de dos de las cuatro brigadas de la Unidad: delincuencia económica y blanqueo. “Moracho sigue trabajando contra en blanqueo -según nuestras fuentes- como siempre ha hecho”. Ahora toca Cataluña y las quejas vienen del secesionismo. “Gajes del oficio”, dicen en la UDEF.