Casi un mes sin noticias de Pablo Iglesias
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Pablo Iglesias lleva sin aparecer en público desde que participara el 19 de diciembre en el mitin que cerró la campaña electoral catalana y un día después se trasladara a Valencia para un acto de homenaje a las víctimas del franquismo. Se cumplen pues tres semanas sin noticias del líder de Podemos más allá de sus redes sociales y, sobre todo, sin respuestas a las preguntas de la prensa. Su última entrevista en una radio se remonta al 15 de diciembre y esa misma tarde abandonó un acto en el Congreso sin atender a los periodistas. Para su último “canutazo” con todos los medios de comunicación hay que remontarse al día 13. Dicho de otra forma, cuando este sábado volvamos a verle en el Consejo Ciudadano Estatal habrá pasado un mes. Y, en principio, el formato será el de un discurso en abierto sin preguntas.
Tampoco hemos visto o escuchado desde antes de las vacaciones de Navidad ni a la portavoz parlamentaria Irene Montero ni al portavoz del partido Pablo Echenique. Las escasas apariciones mediáticas de los morados las han protagonizado Noelia Vera, Rafael Mayoral o Ione Belarra. Y ha habido que esperar desde el 27 de noviembre para que Podemos convocara de nuevo este miércoles 10 de enero físicamente en su sede su ejecutiva, el Consejo de Coordinación. En la rueda de prensa posterior, Echenique, ha explicado que son un “proyecto colectivo” y “no hay más misterio” que ese. En la misma línea, Montero aseguraba por la mañana que han seguido trabajando con total normalidad con su “equipo coral” de portavoces, pero añadía que hay que entender que “los días de Navidad son para estar con la familia, hacer las visitas, las comidas y las cenas que todas las familias han hecho”
Fuentes de Podemos explican que Iglesias, Montero y Echenique han estado trabajando (“todas las navidades”, según Vera) en el informe que presentará el sábado ante el Consejo Ciudadano Estatal y en el que hará un análisis del año pasado y avanzará la estrategia para este 2018. Se espera además un primer análisis en profundidad del mal resultado en Cataluña que Echenique ha atribuido a la “barrera comunicativa” que no han sabido superar para hacer llegar sus mensajes a la ciudadanía. Es “enormemente difícil”, según el secretario de organización morado, en un “contexto polarizado” porque no es un trabajo que depende solo de ellos. Depende también “de por qué temas estén interesados, legítimamente por supuesto, y también de las declaraciones de los demás agentes políticos”.