Al menos 25 muertos por los incendios de Los Ángeles: llegan las primeras detenciones de pirómanos

Los bomberos luchan contra estos incendios que desde hace una semana, avivados por los poderosos vientos de Santa Ana, han arrasado cerca de 16.500 hectáreas

EFE

Bomberos y equipos de búsqueda y rescate inspeccionan el lugar de una casa incendiada en Altadena, California

Redacción digital

Madrid - Publicado el

3 min lectura

      
      
             
      

Los devastadores incendios que azotan Los Ángeles desde hace una semana han dejado ya un saldo trágico de al menos 25 muertos, según el último informe del Departamento Forense de la ciudad. La situación sigue siendo crítica, con miles de hectáreas consumidas por el fuego, avivado por los vientos de Santa Ana que han complicado las labores de extinción. Mientras tanto, la Policía de Los Ángeles ha anunciado que se han producido las primeras detenciones relacionadas con la provocación intencionada de estos incendios, lo que añade una capa de tensión a un desastre ya de por sí devastador.

El fuego Eaton, el más mortífero de los dos grandes incendios que azotan la región, ha cobrado la vida de al menos 17 personas, entre ellas Zhi Feng Zhao, un hombre de 84 años que ha sido identificado como la última víctima fatal. Por su parte, el fuego Palisades ha sido responsable de ocho muertes adicionales. En este siniestro, que sigue sin control, la Policía ha confirmado que 13 personas siguen desaparecidas, aunque esta cifra es una mejora respecto a los 35 desaparecidos reportados anteriormente.

Este incendio, que ha arrasado unas 9.600 hectáreas en el área de Palisades, ha destruido miles de viviendas y dejado a decenas de miles de personas sin hogar. Las autoridades locales informan que el fuego está actualmente controlado solo en un 17%, lo que indica que aún queda mucho trabajo por hacer para contenerlo por completo.

El fuego Eaton, que ha afectado unas 5.700 hectáreas, ha sido controlado en un 35%, aunque la amenaza sigue latente y la situación continúa siendo grave.

En medio de este desastre natural, la Policía ha comenzado a dar noticias de esperanza, aunque también de indignación. A través de una rueda de prensa, el comandante Steve Embrich confirmó que se han producido 14 arrestos vinculados a los incendios. De estos, tres personas han sido detenidas bajo la acusación de provocar los fuegos, lo que podría abrir la puerta a investigaciones más profundas sobre la posible acción deliberada detrás de algunos de los incendios.

Los otros arrestos responden a delitos diversos como vandalismo, robo, incumplimiento de las restricciones de toque de queda o incluso casos más insólitos, como la suplantación de identidad de bomberos y policías, lo que refleja el caos que la crisis ha desatado en la ciudad.

      
             
      

Los vientos de Santa Ana, característicos por su intensidad y capacidad para propagar las llamas rápidamente, han sido un factor determinante en la magnitud de los incendios. Estos vientos, junto con la sequedad de la vegetación, han creado un caldo de cultivo perfecto para la propagación de los fuegos. Los bomberos, que han estado trabajando incansablemente en condiciones extremas, se enfrentan a un desafío monumental para contener las llamas y evitar más muertes.

La cifra total de hectáreas afectadas por los incendios en Los Ángeles alcanza ya las 16.500, una extensión devastadora que subraya la magnitud del desastre. Las autoridades, además de la Policía y los bomberos, han solicitado ayuda de otros estados y organizaciones para hacer frente a la emergencia, que amenaza con seguir creciendo si no se logra un control efectivo en las próximas horas.