Dilema económico en Europa

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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El veto de Bruselas a los presupuestos de Italia es una medida inédita en la Unión Europea, que ve peligrar su futuro por la indisciplina económica de algunos de sus miembros. Aunque el Gobierno populista italiano ha puesto el grito en el cielo, aún tiene de plazo hasta el 14 de noviembre para revisar sus cuentas y acomodarse a las reglas de estabilidad firmadas por todos los países miembros. Muy mal ha tenido que ver las cosas la Comisión Europea para dar este paso. Italia es uno de los países fundadores de la Unión, su economía tiene un tamaño considerable y existe el riesgo de una nueva oleada de euro-escepticismo y populismo ante las próximas elecciones europeas.

El problema latente, que afecta sobre todo a Italia pero también a Francia, España y Portugal, es el encarecimiento de los créditos a los países más endeudados. La espiral de más deuda, más impuestos y más paro, es nefasta para la estabilidad económica y la sostenibilidad del sistema de bienestar. Sin embargo las fórmulas populistas, como la que encarna el actual Gobierno italiano, proponen aumentar el gasto cuando la economía no se ha recuperado lo suficiente ni las cuentas públicas se han saneado. La demagogia puede contentar a la propia parroquia, pero puede conducir a la ruina de todos. Veremos la respuesta italiana dentro de tres semanas.