J. L. RESTÁN | LÍNEA EDITORIAL
Orgullosos de lo que hacemos
Los datos ofrecidos por la Ministra de Sanidad sobre el número de trasplantes que se realizan cada día, nos recuerdan que estamos a la cabeza mundial en la donación de órganos y en este tipo de operaciones punteras.
Madrid - Publicado el - Actualizado
1 min lectura
La tendencia de los españoles a ver el lado vacío de la botella, a urgar en las heridas y en los problemas como efecto de nuestra baja autoestima, no se corresponde con la realidad de una nación que tiene sobrados motivos para sentirse orgullosa, sin ocultar fracasos y problemas. Es verdad que España es un país con no pocos problemas pendientes, lo preocupante es la permanente tentación del desánimo.
Los datos ofrecidos por la Ministra de Sanidad, Dolors Monserrat, sobre el número de trasplantes que se realizan cada día, nos recuerdan que estamos a la cabeza mundial en la donación de órganos y en este tipo de operaciones punteras. Es un dato que indica que los españoles ejercemos una solidaridad que no siempre se ve y que actuamos con una generosidad que no siempre se cuenta. Valores que además son efectivos gracias a una sanidad pública, universal y gratuita de calidad, y a una alta cualificación y profesionalidad de nuestros médicos.
Al dato de los trasplantes podríamos añadir otra serie de indicadores. Por ejemplo, España es uno de los nueve países más seguros del mundo, con una alta tasa de eficacia policial en la resolución de los casos. España, además, es líder mundial del turismo, el segundo país más visitado del planeta. Quizá sea hora de poner en marcha un discurso político y cultural que nos libre de nuestros fantasmas. Un relato en el que lo que somos y lo que hacemos se convierta en motivo de orgullo y esperanza para afrontar tantas tareas pendientes.