Madrid - Publicado el - Actualizado
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Hace un mes, en Albacete y en presencia del presidente Sánchez, García-Page dijo con rotundidad que se opondría a un modelo fiscal que troceara la riqueza de España y se usara como arma arrojadiza. Ayer, con una rosa en la mano y la seriedad propia de una declaración institucional, se ratificó. El presidente de Castilla-La Mancha se opone al pacto que Sánchez ha negociado con ERC y que mañana, viernes, las bases del partido deberían ratificar.