Elogio de José Jiménez Lozano

La concesión de la medalla Pro Ecclesia et Pontifice al escritor José Jiménez Lozano, a petición del arzobispo de Valladolid, cardenal Ricardo Blázquez, representa el agradecimiento a un intelectual que ha hecho posible el fecundo diálogo entre la fe y la cultura en una España de acelerados procesos de cambio. Pero además este singular reconocimiento de la Iglesia señala el valor de quienes testimonian el sentido de la vida a través de la literatura, de la comprensión de la historia y de la pedagogía del bien y de la verdad a través del periodismo.

En la exposición de motivos presentada para esta concesión pontificia a Jiménez Lozano, premio Cervantes de nuestras letras, se especifica un dato que quizá no muchos conozcan: la contribución de este hombre de costumbres austeras y acendradas creencias en la fe de sus mayores, al proyecto de Las Edades del Hombre. José Jiménez Lozano, castellano recio que participa activamente en la vida de su parroquia y siempre se ha considerado hijo de la Iglesia, representa a una generación que ha sabido trasmitir la razón y la raíz de una cultura, la occidental, que no se entendería sin la aportación del cristianismo. La obra literaria de Jiménez Lozano, cincelada con una inmensa libertad de espíritu, es un bálsamo de gracia y autenticidad para el espíritu. Enhorabuena pues a José Jiménez Lozano.