Intolerable acoso independentista

El inicio de la campaña electoral se ha visto empañado por el acosos de un grupo de independentistas a varios políticos constitucionalistas, entre ellos la candidata del PP por Barcelona, Cayetana Álvarez de Toledo y la candidata de Ciudadanos al Parlamento europeo, Maite Pagaza. Cuando intentaban acceder a un acto en la Universidad Autónoma de Barcelona se vieron rodeados por más de doscientos radicales que intentaban impedir la conferencia convocada por la asociación de estudiantes constitucionalistas “S’ha acabat”. Este acto de violencia intolerable desvela la situación de acoso que padecen en Cataluña quienes no ceden a la presión de un independentismo que trata de ocupar todos los espacios sociales y que no duda usar el matonismo más repugnante sin que las instituciones públicas ofrezcan la mínima cobertura a quienes son agredidos.

Un aspecto especialmente preocupante es que esta violencia haya tenido lugar precisamente en la Universidad, el ámbito del diálogo sereno, de la crítica y de la búsqueda compartida de la verdad, ahora un espacio invadido por ideologías sectarias. En Cataluña se palpa la impunidad de determinados grupos políticos que han tejido una red de acoso sistemático a los que no piensan como ellos. Por si fuera poco, los medios cercanos al independentismo tratan de criminalizar a quienes sufrieron el acoso y a quienes combaten cada día por la libertad en un entorno hostil, un verdadero síntoma de envenenamiento social.