Los aliados de Pedro Sánchez
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Desde la moción de censura de 2018, a nadie sorprende la pasión de Pedro Sánchez por alcanzar el poder sin demasiados escrúpulos respecto a los acuerdos necesarios para conseguirlo. Aunque algunos destacados socialistas dijeran que el PSOE nunca iba a traspasar determinadas líneas rojas, la realidad ha venido a llevarles la contraria. El acuerdo para que gobiernen los socialistas en Navarra, va a permitir que Bildu, el partido que no ha condenado los asesinatos de ETA y que organiza homenajes a los terroristas, se siente en las instituciones. En Baleares se repite el modelo de gobiernos con populistas y con los nacionalistas de Més, que propugnan un pancatalanismo que también afecta a Valencia, donde Ximo Puig gobierna con Compromís.
Este panorama, al que se suman los acuerdos con Podemos en la Rioja y Canarias, apunta hacia una estrategia nacional que hará que Pedro Sánchez se convierta en el Presidente del Gobierno de España con el apoyo de populistas, nacionalistas y separatistas. Convendría que Sánchez y su equipo abandonaran cualquier pose de cinismo y dejaran de reclamar la abstención del Partido Popular y Ciudadanos en la sesión de investidura. Habrá socialistas que no estén de acuerdo con esta alianza global con nacionalistas y radicales, pero guardan estricto silencio. Esta es la paradoja, que el PSOE, hasta ahora uno de los pilares de la estabilidad de nuestro sistema político, se alía para gobernar con quienes quieren acabar con el modelo constitucional. Hay motivos para la preocupación.