Pacto de Vivienda

El PP ha presentado este fin de semana la que ha llamado “Declaración de Asturias, que incluye una serie de medidas para intentar solucionar el grave problema de la vivienda. Los populares, con un amplio poder autonómico, se han comprometido a rebajar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), que grava las viviendas de segunda mano, al 4 por ciento. Muchas regiones tienen un tipo del 10 por ciento.

El principal partido de la oposición propone, para hacer frente a la crisis de la vivienda, una acción rápida para que haya pronto suelo disponible y se pueda solucionar la falta de oferta. Es una buena noticia que la oposición sea propositiva, como lo fue hace unos meses cuando puso encima de la mesa ideas para favorecer la conciliación familiar. Otra cosa es que esas ideas acaben sepultadas en la vorágine de las polémicas a corto plazo.

El problema de la vivienda exige una gran coordinación de los diferentes niveles de la administración sobre todo de los ayuntamientos y de las Comunidades Autónomas. Y, sobre todo, requiere una apuesta estable a medio y largo plazo que es imposible sin un gran Pacto de Estado. A menudo parece que los principales partidos políticos quieren obtener algún punto en intención de voto a base de anuncios que luego se quedan en papel mojado. Sánchez, por ejemplo, siempre que quiere ocupar durante algunas horas la atención informativa, dice que va a poner en marcha medidas en este campo, de las que luego no tenemos noticia.