Venezuela: que la soberanía popular se respete

María Corina Machado resiste, y resistirá. No parece que la maquinaria represiva que el chavismo emplea y seguirá empleando contra ella pueda conseguir que esta mujer de 57 años, que desde 2002 sostiene un compromiso firme en defensa de la democracia en Venezuela, desista de su lucha. Maduro quiere a Machado fuera de Venezuela. La dictadura, a través de su ministro Diosdado Cabello, hostiga a sus familiares, difunde bulos que la sitúan fuera del país y miente a los venezolanos diciéndoles que les ha abandonado. La entrevista, concedida desde Venezuela al diario El Mundo, desmiente los bulos, da cuenta de su fortaleza moral y retrata la perversión de una tiranía que mantiene presos a menores acusados de terrorismo a los que tortura y veja en sus cárceles.

A pesar del terror generalizado, Machado sostiene que el 10 de enero será un momento definitivo. Está convencida de que el chavismo está tocando a su fin y de que si Maduro no acepta los términos de la negociación que le ha ofrecido la oposición, no le quedará más remedio que “aferrarse a sangre y fuego al poder”. Lo dice convencida de que los pasos que Estados Unidos e Italia han dado, así como las Investigaciones de la Corte Penal Internacional son de extrema relevancia. Pero falta algo más. El régimen ha estrechado lazos con las redes del crimen organizado y los capitales fruto de estas actividades entran en el mercado legal. ¿Dónde está Europa? y ¿Dónde está España? Desenmascarar a Maduro y forzar su salida por medios lícitos pasa por reconocer a Edmundo González como presidente electo. El próximo día 10 los venezolanos deberían tener a su presidente de vuelta porque, como grita Machado, “la soberanía popular se respeta”.