Taxistas madrileños viajan a Polonia a llevar provisiones y a recoger a ucranianos

Unos 30 taxis partirán en los próximos días. Irán dos conductores por coche. Tardarán unas 30 horas en llegar

Belén Ibáñez

Madrid - Publicado el - Actualizado

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No cesan las muestras de solidaridad de los madrileños con el pueblo ucraniano. Hoy, nos vamos a centrar en la que van a llevar a cabo 60 taxistas madrileños que, a bordo de 30 vehículos, van a Ucrania a llevar ayuda humanitaria. Y a la que vuelven, intentarán traerse a familias de refugiados que quieran venir a la región. La idea es salir en breve. Están terminando de cerrar el asunto burocrático con la Embajada de Ucrania para que no tengan problemas en esta aventura. Van a hacerlo en parejas y utilizando coches grandes, de hasta 9 plazas para aprovechar bien el espacio. Para ir llevarán medicamentos y alimentos que recogerán del Zendal y volverán con las familias que les asigne la embajada de Ucrania. La ida la harán del tirón para no perder tiempo. Angel Martínez es uno de esos taxistas voluntarios. "iremos dos taxistas por coche para no tener que parar. Mientras uno conduce el otro descansa. Tardaremos unas 30 horas en llegar. Solo pararemos para comer y estirar las piernas..." La vuelta, eso si, será más larga porque al viajar con familias habrá que hacer más paradas. Una vez en Polonia, los taxistas dormirán en un hotel para poder descansar y darse una ducha.

En viaje de ida irán con alimentos y medicamentos que recogerán del Hospital Isabel Zendal y la vuelta la realizarán con aquellas personas que les haya asignado la embajada de Ucrania. Solamente en gasolina hay pagar unos mil euros por taxi, además de los peajes, y la comida. Para ayudar puedes hacerlo a través de un número de cuenta o pagando con tarjeta bancaria que podemos encontrar en la página web de la Federación Profesional del Taxi. fptaximadrid.es.

Entre esos conductores, hay tres mujeres taxistas. Una de ellas es además madre de 2 hijos de 10 y 12 años, y eso es precisamente lo que le ha animado a emprender esta aventura. Se llama Pilar Ibáñez y dice que desde el primer momento se puso en la piel de esas madres huyendo de la guerra. " es cierto que al ser mamá te hace más sensible y empatizas más con esa situación. Esas madres que tienen que huir del país con los niños de la mano y dejando al padre de sus hijos que se tiene que marchar al frente..."

Nos cuenta que sus hijos han entendido perfectamente que su madre se vaya a ayudar. Querían, dice, que les llevara todo lo que tienen en su cuarto a esos niños...una situación dura, de la que también se saca enseñanzas para los más pequeños. "siempre se saca algo positivo hasta de lo malo. Yo les he ensañado a mis hijos que hay que ser independientes, porque muchos de esos niños urcranianos han tenido que huir de su país solos. Además les he explicado que hay que terminar con los egos y que no tienes que imponer tus ideas por la fuerza, que no podemos pretender siempre razón y arrasar por ello."

El taxi siempre fue solidario, comenta, quizá porque escuchan mucho a la gente y la acompañan en situaciones complicadas yendo a un hospital o un tanatorio... Ahora lo vuelven a demostrar, llevando con orgullo hasta Ucrania sus coches blancos con la banda roja. Los taxis de Madrid.