La vacuna contra el cáncer de mama, cada día más cerca: científicos estadounidenses prueban una en humanos

El cáncer de mama constituye, aproximadamente, un tercio de todos los que se diagnostican en mujeres. Según el Sistema Europeo de Información del Cáncer, en 2020 se diagnosticaron un total de 34.088 nuevos casos de cáncer de mama en España. De hecho, en nuestro país, aproximadamente el 30% de los cánceres que diagnostican en mujeres se originan en la mama.

Este tipo de tumor, según publica la GEICAM, suele aparecer entre los 35 y los 80 años aunque la franja de los 45-65 es la de mayor incidencia. Por suerte, muchos investigadores tratan de entender mejor el comportamiento y la evolución de este cáncer con un objetivo: encontrar alguna forma de prevenirlo y curarlo.

Bajo esta premisa trabajan los científicos del Cleveland Clinic's Lerner Reasearch Institute, cuyos detalles aparecen reflejados en un artículo que publica la web ClinicalTrials.gov.

En concreto, están trabajando en la elaboración de una vacuna contra el cáncer de mama. Está comenzando su primera fase de ensayos en humanos y pretenden prevenir el desarrollo del cáncer de mama triple-negativo. Actualmente la única opción para las personas que tienen un riesgo elevado de desarrollarlo es una masectomía. Por tanto, el suero mejoraría las perspectivas de aquellas personas que han sobrevivido a este tipo de cáncer.

El ensayo busca confirmar las dosis adecuadas de la vacuna y se probará sobre una horquilla de 17-24 pacientes que hayan recibido tratamiento para este cáncer en los tres años previos. Además, deberán haber sido declarados libres tumores pero tener un alto riesgo de recaída.

A esas personas se les administrará el suero en tres dosis separadas por dos semanas. Si dicho estudio demuestra que la dosis es efectiva, poco a poco irán ampliando el número de participantes.

Respecto al mecanismo de la vacuna, los expertos explican que se prepara al cuerpo para reaccionar contra una proteína, la a-lactalbumina. Es una sustancia que se produce durante las últimas etapas del embarazo y durante la lactancia y que también se "sobreexpresa" en los tumores emergentes.

Entre las conclusiones que ya han probado, dicho suero también logró frenar el crecimiento de tumores existentes en animales.

Sin embargo, no cabe apresurarse. Este ensayo se encuentra en fase uno y la eficacia se valorará en los ensayos de fase dos y tres. Los investigadores se encuentran trabajando con cautela y también seguirán de cerca aquellos efectos secundarios que puedan ir surgiendo.

Por otro lado, también habrá que analizar el perfil de los pacientes. El motivo es el siguiente: es probable que el suero no se comporte de la misma forma en todas las mujeres que formen parte del muestreo.

Habrá que seguir muy de cerca cómo se produce este ensayo y que podría convertirse en un gran avance para la lucha contra esta enfermedad.