Tusi o cocaína rosa: la droga consumida en España por la que habría muerto un joven de 14 años en Madrid
Es una droga de diseño que eleva el estado de ánimo, pero produce alucinaciones visuales y auditivas y es más adictiva que la cocaína y las metanfetaminas
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Un joven de 14 años ha fallecido por intoxicación en Getafe después de ingerir una lata de 'Red Bull' que contendría unos dos gramos de la conocida como 'cocaína rosa' o 'tusi', una mezcla de sustancias como la ketamina o el éxtasis, han informado a Europa Press fuentes del entorno de la víctima, policiales y de Emergencias Comunidad de Madrid.
Los padres del fallecido ya han interpuesto una denuncia ante la Policía Nacional, que investiga lo sucedido como un delito de homicidio. El joven fue enterrado ayer. El asunto se pondrá en manos del fiscal de Menores, quien tomará declaración a las personas involucradas en el caso una vez sean identificadas y decidirá sobre las investigaciones a realizar.
El nombre
Tusi, tucibi (2CB), polvo rosa, cocaína rosa, venus, erus, nexus... son solo algunos de los nombres que recibe esta sustancia que fue creada en un laboratorio en Estados Unidos ente los años setenta y ochenta del siglo pasado y que ha vuelto a resurgir siendo muy consumida por gente de clase alta.
Está tan en boga que cada vez se incauta más en operaciones policiales contra el narcotráfico. Esto ocurría hace un año: Agentes de la Policía Nacional desmantelaban en la localidad madrileña de Torrejón de Ardoz un laboratorio de elaboración de la droga sintética conocida como “cocaína rosa”. Era la operación Pantera por la que se arrestaba a dos personas como presuntos encargados de la elaboración y distribución de la sustancia estupefaciente por Madrid, Toledo y Málaga.
Días antes, la Policía desmantelaba en Sevilla un clan familiar que comercializaba con diferentes sustancias estupefacientes, entre ellas "cocaína rosa", droga que por su alto precio no es muy habitual encontrarla en la capital andaluza. Pero no es la primera vez que se encuentra "tusi" en operaciones policiales. En uno de los grandes golpes al narcotráfico en nuestro país, agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, intervenían en enero de 2021 en Barcelona 827.000 pastillas de MDMA, 76 kilos de sulfato de anfetamina, 39,5 kilogramos de cristal, 217 litros de anfetamina líquida, 310 kilogramos de hachís, 89 kilogramos de marihuana, 2.000 dosis de LSD y 1,65 kilogramos de "cocaína rosa". Los once detenidos formaban una de las organizaciones criminales con mayor potencial en la elaboración y tráfico de drogas sintéticas en la historia del narcotráfico en España. Disponían de dos laboratorios de producción de anfetamina, MDMA, metanfetamina y “cocaína rosa” y un centro de almacenaje de la droga en la Ciudad Condal.
Son solo algunos ejemplos de que esta sustancia, cuyos verdaderos efectos no son muy conocidos, cada vez está más presente en el mundo nocturno de fiestas y droga. Detectado su consumo en la costa Mediterránea, este cada vez está más extendido, aunque su alto precio hace que sea conocida como "la droga de los ricos".
¿Qué es en realidad la cocaína rosa?
Es la droga más cara del mercado. Un gramo de esta sustancia puede costar más de 100 euros, el doble que un gramo de cocaína. Lo curioso es que pese a ser conocida como "cocaína rosa" en su composición no hay cocaína, sino LSD (dietilamida del ácido lisérgico) y éxtasis. La combinación del ácido lisérgico y el éxtasis, ambas sustancias psicotrópicas producen efectos alucinógenos y euforia. Esa euforia crea en el consumidor la falsa sensación de estar haciendo muy bien las cosas. Sin embargo, entre los efectos -que duran entre 4 y 8 horas- están episodios de pánico, ataques de ansiedad, depresión, alteraciones emocionales y pérdida de la identidad.
Genera un alto nivel de adicción lo que convierte al tusi en una droga mucho más peligrosa que la cocaína y que las metanfetaminas.
Se introduce en el organismo por inhaladores, también se puede esnifar, diluir en bebidas, fumarla o en forma de pastillas. Al cabo de 15 o 20 minutos se comienzan a notar sus efectos que duran entre 4 y 8 horas. Una vez llega al cerebro, libera grandes dosis de dopamina, noradrenalina y adrenalina y efectos adversos como la ansiedad y ataques de pánico al alterar los sistemas cardiovascular y neurológico.
Con su consumo prolongado pueden aparecer patologías importantes como hipertensión, arritmias, cefaleas, vómitos, sudoración extrema, convulsiones, enfermedades coronarias como angina de pecho o infarto de miocardio. También puede causar episodios psicóticos y provocar un ictus. En algunas ocasiones puede incluso llevar a sufrir un fallo multiorgánico, lo que supone la muerte.
Creada en un laboratorio a lo Breaking Bad
El padre de esta droga tan de moda ( y que llegó a España hace diez años procedente de Holanda), es el químico estadounidense de origen ruso Alexander Shulgin muy conocido por introducir en el mercado drogas psicoactivas en 1974. Shulgin popularizó, a finales de los años 1970 y principio de los años 80 del siglo pasado el MDMA (comunmente conocido como éxtasis) como tratamiento para la depresión y el estrés postraumático.
Junto a su esposa, Shulgin descubrió muchas feniletilaminas como la familia 2C. La feniletilamina es un compuesto químico que actúa como neurotransmisor y una droga natural del grupo de las anfetaminas generada por el cerebro. Produce sensaciones de placer y sustituye a la sustancia natural que el cuerpo segrega en gran cantidad durante el enamoramiento, siendo la responsable de algunos de los “síntomas” de este proceso: la vigilia, la falta de apetito o la felicidad extrema.
La feniletilamina también la encontramos de forma "no química" en el chocolate negro, en el huevo, el plátano, la soja cruda, las lentejas, las almendras o las nueces.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos señala que el MDMA, uno de los principales componentes del tusi, de la 'cocaína rosa', "se empleó por primera vez en la década de 1970 como una herramienta de ayuda en la psicoterapia (un tratamiento para trastornos mentales que usa la "terapia de conversación"). La droga no estaba respaldada por ensayos clínicos (es decir, estudios realizados con seres humanos) ni contaba con la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (U.S. Food and Drug Administration, FDA). En 1985, la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (U.S. Drug Enforcement Administration, DEA) clasificó a la MDMA como una droga ilegal sin ningún uso medicinal reconocido. Algunos investigadores siguen interesados en sus beneficios para la psicoterapia cuando se administra a pacientes en condiciones cuidadosamente controladas. En la actualidad se están realizando ensayos clínicos para determinar la utilidad de la MDMA como una herramienta de ayuda terapéutica para el trastorno por estrés postraumático y la ansiedad en pacientes terminales, y de la ansiedad social en adultos autistas".
Las consecuencias y los riesgos por consumir cocaína rosa son elevados, pese a ello y por ser una droga que, de nuevo, comienza a introducirse en un sector de la población está aumentando su consumo.