¿Cuáles son los límites de lo que puede hacer Elon Musk si compra Twitter?: "Es difícil que la oferta salga"
El empresario afirma que su oferta de 43.400 millones para convertir a la red social en empresa privada busca proteger la libertad de expresión
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Hace apenas unos días, el 4 de abril, la red social Twitter anunció que Elon Musk, fundador de Tesla, había adquirido el 9,1% de la plataforma. En un principio, el multimillonario no iba a entrar en el consejo de administración, pero eso no quitó que empezara a hacer consultas aleatorias sobre cómo mejorar la aplicación. Desde entonces, la compañía intentó ofrecerle un asiento en la cúpula, donde tendría un mayor poder de decisión. Musk hizo un amago de aceptar, aunque reculó, ya que haber aceptado habría implicado no poder pasar del 15% del accionariado.
Es ahí cuando se empezó a presagiar el verdadero plan de Musk: hacerse con el 100% de la empresa, lo que se confirmó el pasado 11 de abril, día en el que ofreció 43.000 millones de dólares, unos 40.000 millones de euros por ella. Entre sus propuestas se encuentran los cambios en Twitter Blue, una suscripción de pago lanzada el año pasado y que da acceso a funciones premium, como deshacer tuits, cambiar el icono o aplicar temas. Musk sugiere que los usuarios paguen unos dos dólares al mes, además de prohibir la publicidad, una de las principales fuentes de ingresos de la red social.
La primera fortuna del mundo también pretende eliminar la 'W' de Twitter o convertir su sede de San Francisco en un refugio para las personas sin hogar.
Ahora bien, ¿puede salir adelante esta propuesta? Para Ainhoa Torres, profesora de redes sociales de la Universidad CEU San Pablo, "es complicado". Desde que en el año 2006, Parag Agrawal fundase Twitter, su cúpula y los propios tuiteros se han encargado de mantenerla aún sin tener grandes ganancias, "por lo que me cuesta creer que vayan a dejar que eso salga adelante", opinaba la experta.
Torres, que habla de Musk como "el abanderado de la libertad de expresión", considera que la red social no debería estar en manos de una sola persona, ya que "que esté en manos de sus accionistas es lo que facilita que haya esa libertad". Pero, ¿por qué le interesa tanto al fundador de Tesla Twitter? "Él ve que lo que está haciendo es preservar la libertad de expresión. "Eso es para él Twitter", piensa.
De la libertad de expresión, hablaba también Leopoldo Abad, catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad CEU San Pablo, quien considera que las redes sociales "son las que deciden si una información, un tweet o una cuenta, se borra o no se borra".
¿Qué criterios utilizan para ello? Los de los tribunales los sabemos, los tienen que exponer. En las redes esto no ocurre y es por ello por lo que muchas veces "no sabemos cuáles son las razones que están detrás para que se cierre una cuenta", explica Abad.
La píldora venenosa contra Musk
Un día después de que Musk lanzase su oferta para comprar la plataforma, la junta directiva de la misma se armaba contra esta posible adquisición adoptando un "plan limitado de derechos de los accionistas", lo que se conoce como "píldora venenosa".
Esta medida evitaría que cualquiera tenga más de un 15% de participación en la empresa, además de permitir a terceros comprar acciones con un descuento.
Tras ello, la junta de Twitter detalló a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos su plan de defensa y emitió un comunicado asegurando que era necesaria "por la propuesta no solicitada y no vinculante de Musk de adquirir Twitter".
Mastodon, ¿la alternativa a Twitter?
La red social Mastodon, creada en 2016, no fue lanzada en App Store hasta el año pasado y solamente estaba disponible para dispositivos iOs. Desde hace dos días, cualquier usuario puede descargarse de forma gratuita la aplicación.
Ésta ofrece un diseño muy parecido a Twitter, razón por la que muchos ya la ven como una alternativa a la compañía. Su principal ventaja es que en ella no hay ningún tipo de censura ni ninguna manera de recolectar nuestros datos por parte de las empresas. Además, tiene un límite de 500 caracteres para las publicaciones.
Pero, ¿conseguirá finalmente relevar a Twitter? La experta en redes sociales, Ainhoa Torres, lo ve "complicado". "Puede ser una red social a la que den el salto algunos, pero es difícil que se convierta en otro Twitter", concluye.