El gesto con el móvil que haces cada noche antes de dormir y que acaba degradando la batería: acuérdate de quitarlo

Hacer esto tan sencillo podría alargar la vida de nuestro smartphone hasta varios meses más y, sobre todo, evitarnos disgustos

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Este es el gesto con tu móvil que deberías de cambiar

Luis Calabor

Madrid - Publicado el

2 min lectura

      
      
             
      

La batería del móvil es uno de los aspectos que más preocupan a los usuarios. Un smartphone sin batería se vuelve inútil, y con el tiempo, todos notamos cómo su autonomía se va reduciendo. Pero lo que muchos desconocen es que ciertos hábitos diarios aceleran esta degradación, haciendo que en pocos años el dispositivo ya no rinda como el primer día.

Este consejo puede alargar la vida de  tu dispositivo

Entre estos hábitos, hay uno que podría estar afectando la vida útil de la batería del móvil sin que apenas nos demos cuenta: dejar el WiFi activado por la noche. Aunque parezca inofensivo, este pequeño gesto suma ciclos de carga con el tiempo y puede restar meses de vida a nuestra batería.

¿Por qué dejar el WiFi encendido degrada la batería?

El WiFi consume energía incluso cuando no lo estamos usando. Durante la noche, el smartphone sigue conectado a la red, recibiendo notificaciones y realizando tareas en segundo plano. Esto supone un gasto de entre un 2% y un 10% de batería cada noche, según la intensidad de la señal y las aplicaciones abiertas.

A simple vista, puede parecer un consumo mínimo, pero acumulado con el tiempo tiene consecuencias. Si cada noche pierdes un 10% de batería, estarías completando alrededor de 36 ciclos de carga en un año solo por mantener el WiFi encendido cada noche, aunque esté enchufado a la corriente. Teniendo en cuenta que una batería de smartphone suele durar entre 300 y 800 ciclos, este simple hábito puede restar meses de vida útil a tu dispositivo.

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Aunque el móvil está cargando, dejar el WiFi supone un gasto extra y favorece a la degradación de la batería

Desactivar el WiFi antes de dormir puede parecer un cambio menor, pero tiene un impacto positivo. Además, si le sumas los datos móviles, el alcance es mayor y tendrá otro beneficio: asegurar que dormimos sin interrupciones. Al apagar ambos, reduces el consumo nocturno hasta un 20%, lo que significa menos ciclos de carga al año. Este hábito también puede traducirse en un pequeño ahorro de energía a lo largo del tiempo, lo que siempre es positivo.

Apagar el WiFi del móvil antes de dormir es una acción sencilla que puede contribuir a alargar la vida de la batería. Cada pequeño ahorro de energía cuenta cuando se trata de mantener nuestro smartphone en buen estado el mayor tiempo posible y, si bien no es la solución definitiva, se suma a una serie de buenas prácticas que ayudan a que nuestro dispositivo funcione mejor y por más tiempo.