Miguel Lago: "El único límite del humor es el Código Penal"

El humorista cuenta con su propio espectáculo teatral, 'Todo al negro', y es popularmente conocido en televisión por presentar 'Los teloneros' y colaborar en 'Todo es mentira'

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Lucía F. Gallardo

Publicado el - Actualizado

8 min lectura

Miguel Lago es un conocido humorista, aunque también es presentador, comunicador y actor. Se le ha visto tanto en series, como en teatro y televisión. Ha hecho breves apariciones en ficciones como 'Curso del 63' o 'Las chicas del cable' y, actualmente, presenta 'Los teloneros' y sigue colaborando en 'Todo es mentira'. Sin embargo, nunca ha abandonado sus orígenes y cuenta con su propio espectáculo en el Teatro Capitol, 'Todo al negro', donde se puede disfrutar de su "faceta de monologuista y de cómico".

Actualmente, se encuentra "disfrutando del camino" y se siente "enormemente afortunado de poder dedicarse a lo que más le hace feliz", ya que no le falta trabajo y también participa en 'The Hole'. Compaginando este trabajo con el que comparte con Risto Mejide, a quien considera "un fantástico compañero, muy generoso, inteligente y un buen amigo", además de "una estrellaza y un gran capitán". Así lo ha contado el propio humorista en una entrevista para COPE.

Viendo 'El club de la comedia'. Para mi fue una revelación total. Entonces, a raíz de verlo y aficionarme al formato, pues decidí dar el paso y hasta hoy. A través de conocer el género, que era un género que en España no se hacia, pues me empieza picar el gusanillo.

Es mi mejor espectáculo. Es un espectáculo que ya se estrenó, pre pandemia, durante 12 meses. Fue un éxito enorme con todo venido en el Reina Victoria. Y, ahora, doy un paso adelante y llego a Gran Via, al Teatro Capitol. Con un aforo mayor porque el Reina Victoria se nos quedaba pequeño. Entonces, nos hemos ido a un aforo mayor, a Gran Vía y es un paso adelante total en mi carrera. Me hace una ilusión enorme estar en centro neurálgico de la escena y del espectáculo en España.

En el público que viene a la sala, que es mucho mejor. Todos, sin excepción, hemos bajado en cuanto a taquillaje. Otra cosa son los grandes dioses, el Real Madrid, el Barça, esos todavía no están sufriendo. Los que estábamos en UEFA hemos bajado un poquito, pero yo creo que volverá.

También ten en cuenta que yo, por ejemplo, ahora llego al Teatro Capitol. Entonces, yo he hecho una apuesta importante que es ponerme a las 23:00 horas de la noche. Vuelvo a una hora en la que yo ya trabajaba antes de pandemia, pero parece que, ahora, esa hora es tardísimo. Porque, claro, con todas las restricciones que hubo, nos hemos acostumbrado a cenar a las 20:00 horas. Entonces, ahora, de repente, vuelvo a decir a la audiencia que las restricciones de horarios han terminado, que esto ya se acaba, vamos a volver al teatro a las 23:00 horas. Y, en este caso, como hablamos de Madrid, ya se acaban las restricciones de aforo y hostelería. Con lo cual, ya podemos ir a la Gran Vía a ver un espectáculo a las 23:00 horas y, al salir, ir a tomarnos algo. Como se hacía antes y como se tiene que volver a hacer. Que ya lo hemos pasado mal. Yo soy responsable. Yo cumplo todas las normativas que ponen, pero lo que está claro es que no podemos seguir teniendo en la cabeza el mismo esquema mental de hace un año y medio cuando estábamos en los índices que estábamos y viviendo lo que vivíamos. Ahora, la situación es otra y toca volver a la normalidad.

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En 'Todo al negro' se ve mi faceta de monologuista y de cómico. Y, es verdad, que tengo un 'alter ego' que tiene esa prepotencia, esa chulería. Pero, sobre todo, lo que tiene es la lengua muy larga. Entonces, eso hace que mucha gente se sorprenda. Pero, lo que garantizo, es que, desde que empieza el show hasta que termina, es un no parar de reír. Eso es evidente y no lo digo yo, lo dice la crítica. Que vengan a disfrutar porque se lo van a pasar bomba.

Recuerdo baches, pero los dejo atrás. Yo solo miro hacia adelante y con lo bueno. Yo me quedo con lo bueno.

Eran los principios de mi carrera, no me conocía nadie, el público, el poquito que acudía aquella noche, fue muy rebelde. Yo les contesté y la tensión empezó a aumentar. Acabé saliendo escoltado por la Policía porque había dos alcoholizados que, vamos, que me mataban. No se tomaron bien nada. Estamos hablando de que era gentuza, entonces, cuando te cruzas con gentuza, la historia no suele acabar bien.

No. El único límite del humor es el Código Penal. No hay más.

Yo he tenido enfados de personajes de los que he hablado, he tenido enfados de público... Yo las he tenido de todos los colores, pero aquí sigo, como el junco que se dobla, pero siempre sigue en pie. Porque el humor está por encima de todos aquellos que quieran socavarlo. Esto no va para nadie. Va en la profesión, me preocupa muy poquito.

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Ahí estamos, poquito a poco. Todo son escalones que vamos subiendo y me dan felicidad.

Sí, en este caso, en televisión nacional. Nos han hecho este encarguito, humilde y pequeñito, a mi querido Antonio Castelo y a mí. Y, ahí estamos, peleando en una franja horaria muy difícil e intentando hacer humor, que es para lo que estamos para que os riáis.

Yo creo que el humor está estupendo en cualquier lugar que lo pongas. El humor queda bien donde lo pongas porque qué clase de persona te dice que no le gusta reírse o que no tiene sentido del humor, pues sería una pena de vida.

Todos somos iguales delante de las cámaras y detrás. Y todos somos distintos delante de las cámaras que detrás. Risto lo que tiene es que es un fantástico compañero, muy generoso, siempre poniéndose el primero para recibir el primer golpe, inteligente, vivo, mordaz... Es decir, tiene un sentido del ritmo, en televisión, fantástico. Con él se aprende mucho. Y, a nivel personal, un buen amigo. Siempre ha sido generoso. Entonces, cuando eres una persona generosa, los que están a tu alrededor se sienten muy a gusto y muy cómodos. Y así es como nos sentimos con Risto después de tres años.

Uno pensaba encontrarse una estrella distante, frívola y tal. Y lo que te encuentras es una estrella, porque es una estrellaza, pero es el primero de los compañeros. Es un gran capitán. Es mi compañero y es mi capitán. Ser jefe es muy fácil porque un jefe es un señor que le han puesto por encima y se limita a dar ordenes y la gente las tiene que cumplir porque es el jefe. Risto es diferente, Risto es un líder. Y la diferencia entre un jefe y un líder, es que un líder no da ordenes, un líder dice cosas y la gente que está a su lado le sigue porque quiere hacerlo. Esa es la diferencia, por eso digo que no es un jefe, es un líder.

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Era yo, con bigote, hablando serio. Es decir, no tenía una cosa muy allá, un papel pequeñito. Me gusta. Es verdad que me cuesta el tema este de la ficción porque son muchas horas y yo soy hombre de teatro. Estoy más acostumbrado al directo, a salir, llegar y subirme al escenario. Y la ficción... Es que, para una frase, son cuatro horas de preparación y me cuesta mucho. Es un mundo fascinante, con gente muy talentosa. Es algo que me gusta, pero tengo que dedicarle mucho tiempo. Si mañana tengo la fortuna de que me ofrecen o me sale un protagonista en una peli y me tengo que ir tres meses a Santander a rodar... Pues, si es un gran proyecto, con un gran director, evidentemente, haremos el esfuerzo y haremos esa peli. Pero sabe que ya son ocho semanas en las que no puedes hacer más y, en cambio, un espectáculo en teatro, es llegar y hacerlo. He hecho algo de cine, series... Pero, por ahora, me quedo con el teatro. Teatro, tele, ficción. Ese sería mi orden, ahora mismo. Pero, insisto, haré pelis.

Bueno, eso es cosa tuya que me tienes ahí como cómico y no me dejas hacer otras cosas. Al final, es jugar y hoy juego a ser el rey Alfonso XIII, mañana a ser un psicópata y pasado a ser un padre de familia. Es jugar. Vivir otras vidas. Es divertido.

Al final va una cosa ligada a la otra. Estás sobre un escenario y, entonces, de ese escenario te llaman para otro. No es más que eso. Todos son escenarios. Teatro, tele, cine... Todos son lugares a los que subirte y pretender.

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Más que una anécdota, el camino. Lo que estoy es disfrutando del camino, llevo 20 años en esto, me va bien y espero que así sea... Tengo la enorme fortuna. Soy enormemente afortunado de poder dedicarme a lo que más me hace feliz.

'Todo es mentira' y 'Los teloneros'. Arranco, este sábado, en el Teatro Capitol, todos los sábados a las 23:00 horas de la noche. Además, tengo mi canal de Twitch, 'Comedy room tv', donde no solo hago yo directos, sino que produzco todo tipo de formatos vinculados a la comedia con otros artistas y soy el MC de 'The Hole', en Espacio Delicias de Madrid. Así que no me puedo quejar. Estoy trabajando mucho y estoy muy feliz y que dure.

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