Rigoberta Bandini arrasa en la segunda semifinal del Benidorm Fest y apunta a ganadora
Consiguió la máxima puntuación de jurado y televoto, mientras que Gonzalo Hermida se llevó el apoyo del demoscópico sin actuar en directo
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Rigoberta Bandini, muy cerca de Eurovisión. La artista catalana revalidó
su papel de favorita tras arrasar en la segunda semifinal del Benidorm Fest, el certamen organizado por RTVE para elegir al candidato español en Eurovisión 2022. "Ay Mamá", su himno feminista con claro acento en el homenaje a la figura materna, fue la más votada por jurado y televoto en una noche muy irregular a nivel vocal de todos los candidatos y pobres escenografías que devaluaron la calidad de los temas presentados.
Rigoberta Bandini llegó con la presión de clara favorita, aupada por el movimiento eurofán y tras convertirse en un fenómeno musical desde el lanzamiento de “Ay, mamá”. La actuación, muy al hilo del tema, fue un divertido pero a la vez contestatario homenaje a la figura de la mujer con un globo terráqueo con pezón incluido como ensalzamiento de la figura femenina. La puesta en escena, algo caótica y mal realizada, no hizo justicia a una de las apuestas más transgresoras presentadas a Eurovisión y que parece tener fácil su victoria este próximo sábado a la gran final.
Porque Rayden, el otro gran favorito de la noche, se deshinchó con una actuación sólida pero no pletórica. El madrileño tiró de carisma y gracia para convertirse en un predicador que invita a la sociedad a su “Calle de la llorería” para reivindicar la frágil masculinidad y las segundas oportunidades. Se esperaba una gran puesta en escena, pero fue más bien una declaración de intenciones poco efectiva.
En una noche de muchos desafines y dudosas escenografías, Gonzalo Hermida se hizo un hueco en la final sin abandonar su habitación de hotel. El andaluz, positivo por covid, parecía estar resignado a ver pasar su oportunidad en este Benidorm Fest. Pero la sencillez romántica de su “Quién lo diría” y la, tal vez, lástima de las circunstancias, sobrecogió a la audiencia y le brindó la clasificación sólo con la exhibición de su videoclip.
El cuarteto de clasificados lo cerró el madrileño Xeinn con un estilo muy similar al de The Weeknd y un viaje en el tiempo cargado de homenajes a los programas musicales de hace varias décadas. Con un aroma claramente ochentero y unos falsetes llevados a un límite solvente, el madrileño supo exprimir su actuación y salvarse de la quema.
No convencieron tanto las apuestas de una Marta Sango muy irregular vocalmente y poco sorprendente en su actuación de “Sigues en mi mente” y una Sara Deop arrastrada por el éxtasis vivido con Rigoberta Bandini y Rayden. Aunque tiró de gracia, juventud y soltura, su “Make you say” se quedó en un mero espejismo. La chilena Javiera Mena invitó a todos a una ceremonia electrónica donde no faltó la psicodelia y un punto de locura en una actuación con luces fluorescentes y una lúcida máscara, pero poca cosa más de una artista que prometía mucho.
Con los cuatro clasificados de esta noche se completa el line-up de la final con muchas dudas sobre quién será nuestro próximo representante en Eurovisión. Rigoberta Bandini se posiciona en buen lugar, mientras que Chanel podría dar la gran sorpresa del concurso si de nuevo asalta la banca como en la primera semifinal con su vertiginoso numerazo y una coreografía imposible. Todo dependerá de nuevo de jurado y televoto en una final que arrancará este sábado a las