La sorprendente votación de Alemania que le dio el triunfo a Massiel en Eurovisión
Los cinco puntos del jurado germano dieron un vuelco a las votaciones y España logró la victoria por sorpresa sobre Reino Unido
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España aterrizó en el festival de Eurovisión de 1968 envuelta en polémica. TVE había decidido apenas diez días antes del festival sustituir a Massiel por Serrat, que exigió al ente público (y al gobierno franquista de por entonces) interpretar su tema 'La La La' en catalán y no en castellano. Su amenaza obligó a la cadena pública a buscar precipitadamente un nuevo representante. La elegida, después de la negativa de Marisol, se encontraba en Latinoamérica. Massiel, la conocida como 'Tanqueta de Leganitos', tuvo que hacer rápidamente las maletas y viajar a Londres, con escala previa en Alemania para grabar el tema sobre el playback que estaba preparado para Serrat.
Massiel no estaba en el grupo de favoritos para la victoria. De hecho, todo el mundo esperaba la victoria del famosísimo cantante Cliff Richards y su "Congratulations". La francesa Isabelle Aubret ganadora del festival en 1962- y el italiano Sergio Endrigo, que venía de vencer en Sanremo, se erigían como posibles alternativas al tema pop británico.
Massiel, con su vestido de Courrèges, zapatos bajos y medias blancas, cautivó a todos durante su actuación con su alegría arrolladora y un tema contagioso que rezumaba felicidad. Sin embargo, pocos pensaban por entonces que aquel desparpajo exhibido por la madrileña en sus casi tres minutos de canción iba a suponer el primer triunfo de España en un festival en el que había debutado solo siete años atrás.
La votación de aquella edición del concurso musical fue vibrante y llena de dudas con respecto a qué canción sería la ganadora. La ronda de votos empezó siendo favorable a España con los puntos de Portugal (4), Austria (2) y Luxemburgo (1). Pero muy pronto Francia empezó a sacar una ventaja significativa respecto al resto de rivales. Aquel año, el festival había vuelto al anterior sistema tradicional de votación: el jurado de cada país estaba formado por diez personas, las cuales debían dar un punto a su canción favorita. De este modo, un mismo país podía recibir de golpe diez puntos y el sistema de reparto era una incertidumbre en cada votación. Cliff Richards igualó a Francia a mitad de votación y parecía que el triunfo iba a estar entre ambos países. La suerte de España, sin embargo, cambió en la recta final.
Mónaco (4), Finlandia (3), Francia (4) e Italia (3) fueron generosos con Massiel, que se situó en segunda posición. Reino Unido y España se negaron puntos entre sí y a falta de dos países por votar Cliff Richards aventajaba en tres puntos a Massiel. Sin embargo, el jurado alemán desequilibró la balanza en una sorprendente votación: 5 puntos a España y solo 2 a Reino Unido. Fue la máxima votación de un país a otros en toda la noche, junto a los seis puntos que también recibió Francia de Bélgica y Suecia de Noruega.
A falta del jurado yugoslavo, España ganaba por un punto a Reino Unido. Pero Yugoslavia sorprendió a todos cuando en la última votación dejó en blanco a los dos países que se disputaban el triunfo. Katie Boyle, presentadora del festival, obligó al portavoz del jurado a repetir su votación puesto que había concedido 11 puntos en lugar de diez, que era lo reglamentario. Los británicos abrazaban así la posibilidad de que hubiera algún error y se pudiera forzar un hipotético empate. Pero no fue así. Massiel ganó (gracias principalmente al voto alemán) y la 'Tanqueta de Leganitos' se subió de nuevo al escenario para cantar su ya mítico "La La La".
La victoria de Massiel siempre ha estado sujeta a la rumorología y las acusaciones de posible compra de votos. En un libro publicado en 1981, "La trastienda de TVE" se cuenta que en la cadena pública estaban "aterrados" por si, después de la polémica de Serrat y de haber hecho que la BBC cambiase todos los programas y materiales promocionales, España quedaba en mala posición. Así que, en palabras literales del libro, “la gente se pone en movimiento. Hay que tocar todos los resortes. Todo el que puede hacer algo se moviliza. Y al parecer, nos pasamos“.