ALBACETE
Juan Leal corta tres excesivas orejas con un buen lote de Fuente Ymbro
El francés triunfa por la vía tremendista y con regalía presidencial. Ferrera no tuvo su mejor tarde y Lorenzo, de vacío.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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En la Fiesta se puede triunfar de varias maneras. Una de ellas es haciendo el toreo más clásico. Y otra, que también cala mucho en el tendido, es el de cruzar la raya de la valentía y alcanzar la del tremendismo. Cuando se tira por ese camino, que es muy respetable y lícito hacerlo, se consiguen más “¡ay, uy, uf!” que “olés”. La tauromaquia es emoción y hay que llegar al público soberano, pero ante la catarsis de un sábado ferial, la presidencia debe velar por mantener el rigor de Albacete. Y Genoveva Armero concedió el doble trofeo tras una estocada muy defectuosa.
Así, Juan Leal con “Denunciante” se lució por tafalleras antes de un puyazo de trámite con una pequeña siesta en el peto. Después, fue prendido aparatosamente en el quite, transcurriendo unos segundos que dejaron sobrecogido al respetable. Leal se volvió a la cara sin mirarse y continuar con el capote, contando con la unánime aprobación popular. Tras unas efectivas banderillas, el francés se fue a los medios para hacer dos pases cambiados y luego un circular aprovechando la inercia del muy buen pitón derecho que se veía claro y cristalino. El trasteo lo basó en meterse entre los pitones, acortando distancias y apostando a la carta tremendista. Hubo un inicio más ligado aunque abriendo el compás y luego pases con enganchones y sin nada que apuntar al natural. Bajonazo y golpe de puntillero con dos orejas excesivas. Repetimos: el segundo trofeo es potestad de la presidencia, así que Genoveva Armero debió dejarlo en un apéndice. Por aquello de dejar colocado el listón de la exigencia para el resto de días.
Después, el quinto se llamaba “Fanfarrón” y ya que estamos con los juegos de palabras, tampoco dio motivos para fanfarronear en varas y banderillas. Ahora bien, sí que puede jactarse de desbordar en varios momentos a Leal, que toreó siempre periférico y con ambas manos se cuentan los muletazos que no hubo toque en las telas. De hecho, se dio el toro dos vueltas de campana, una al inicio y otra al final por dos tirones por bajo al de Ricardo Gallardo. Buen toro por ambos pitones, sin duda. El último tramo fue lo más jaleado por ser más reunido y ligado, dejando también su particular sello de encimismo. Pinchó en buen sitio y luego fue arrollado al entrar a matar, con nuevo susto, por suerte sin consecuencias, para dejar una estocada entera y luego un golpe de puntilla. Se pidió y concedió una oreja, la tercera. Puerta grande y de propina colocarse en cabeza para coger una posible sustitución.
“Señorío” fue el primer “fuente Ymbro” para Antonio Ferrera en el abreplaza. Pero señorío no hubo en la entrega en el saludo de capote. Y ni nos enteramos de la suerte de varas. En banderillas se movió más topando que embistiendo, con un cabeceo final apuntando al cielo en la media altura y blandeos al bajar el estaquillador. Ferrera estuvo sin demasiado sitio ni limpieza en la faena. Algún natural suelto mientras sonaba la música. Y poco más. Sobró el pasodoble y gran parte de la faena porque el toro estaba visto desde hacía mucho tiempo. Mató de media caída, atravesada y trasera, precisando un golpe del verduguillo.
“Adulador” como cuarto no quiso ni ver la puya, como si tuviera alergia al metal. Sin pena ni gloria pasó también en los palos, siendo un tercio con altibajos. En la muleta, entre un toro protestón y descastado en grado superlativo, Antonio nunca se vio cómodo y no se complicó. Para colmo de despropósitos, dio un metisaca en zona baja que hizo pupa, pinchazo sin soltar y terminó echándose.
“Calderero” hizo las veces de tercero y había poco en el caldero. Puyazo casi sin querer, parado en banderillas y muy venido a menos en la muleta de un Álvaro Lorenzo que lo intentó con denuedo esfuerzo ante un toro tan soso como descastado. Mató de pinchazo soltando y estocada trasera, con dos descabellos.
Y ya en el sexto lugar, “Inflactor” tampoco quiso sobresalir en puya y banderillas. Perfil bajo, sin más. Pareció una calcomanía de su anterior capítulo. Rebañar y rebañar pero nada salía en la cuchara. Plomizo final ante un astado que terminó cayéndose de costado por su falta de bravura. Debió ser infracción grave por descaste. Mató de estocada habilidosa y Lorenzo se fue cabizbajo porque la suerte le fue esquiva en el sorteo.
Albacete, sábado 10 de septiembre de 2022. 3ª de Feria. Algo más de media plaza.
Toros de
, justos de presencia y varios carentes de remate en los cuartos traseros. Resultaron descastados y venidos a menos, excepto primero y cuarto que tuvieron muchas opciones en la muleta.
, ovación y leves pitos.
, dos orejas y oreja tras aviso.