3ª COPA CHENEL

La madurez de Robleño, la proyección de De Torres y un gran “Provechoso” de Ibán

Fernando Robleño y Adrián de Torres han salido a hombros en Navas del Rey. Un trofeo paseó Lama de Góngora con el sexto de Baltasar Ibán, un toro de vuelta al ruedo.

Fernando Robleño, con dos de las tres orejas cortadas este sábado en Navas del Rey

Sixto Naranjo Sanchidrian

Publicado el - Actualizado

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Tarde intensa y de emociones la vivida este sábado en el tercer festejo de la Copa Chenel en la plaza de Navas del Rey. La maestría de Fernando Robleño, la proyección de Adrian de Torres y la apuesta de Lama de Góngora dotó de argumentos un festejo al que se sumaron la bondad de dos toros de Flor de Jara y la casta y bravura de un gran “Provechoso” de Baltasar Ibán.

La tarde de Robleño ha sido para guardar y recordar durante mucho tiempo. Entendió la nobleza sin entrega del toro de Flor de Jara que abrió plaza. Le cogió el aire y las alturas que demandaba el ‘santacoloma’ de Cancela. Toques precisos y temple para conducir con limpieza las embestidas. Una estocada casi entera dio paso a una oreja de peso.

Dos más sumó del complicado cuarto de Baltasar Ibán, un astado violento y que nunca humilló y ante el que Robleño dio una lección de técnica portentosa. Tragó en el sitio, templó y mandó para limar asperezas. Y cuando tuvo al toro entregado, hasta le robó dos tandas en redondo plenas de sometimiento y expresión. Tras otra estocada, cortó dos merecidas orejas.

Adrián de Torres firmó una muy destacada actuación en Navas del Rey. Más allá de lo despojos, quedó la impresión de torero con futuro si se le ofrecen las oportunidades que merece. Suyos fueron los mejores muletazos de la tarde al noble segundo de Flor de Jara. El torero de Linares tiró con rotundidad y profundidad de los viajes del toro. Y después, con el animal más apagado, aguanto varios parones para terminar sacando dos derechazos de mucho mérito. Faena a más que remató de una estocada entera que desembocó en el doble trofeo.

El quinto de Ibán no le permitió redondear por su brusquedad y mal estilo embistiendo. No lo vio claro tampoco Adrian con la espada y el descabello.

Lama de Góngora estuvo digno con el tercero de Flor de Jara, un animal deslucido y falto de raza con el que el sevillano solo lució en una tanda a derechas cuando se enfibró más con él.

Sin embargo, el sorteo le había puesto en el camino a “Provechoso” de Ibán en sexto lugar. Un toro que se arrancó con alegría al caballo en los dos puyazos que tomó, que descolgó en un precioso quite por chicuelinas de Robleño y que embistió con alegría, buen son y nobleza en el tercio de muleta. Lama de Góngora aprovechó las cualidades del toro para ligar varias tandas de buen corte. Temple y firmeza como armas para no verse desbordado por el exigente animal del hierro madrileño. Una estocada delantera dio paso a una oreja, con petición de la segunda, y una también merecida vuelta al ruedo para el toro.

Navas del Rey (Madrid), sábado 4 de septiembre de 2021. 3ª Copa Chenel. Tres cuartos del aforo permitido.

Toros de Flor de Jara (1º, 2º y 3º), bien presentados, entipados. Nobles pero sin entrega los dos primeros y deslucido el tercero. Tres más de Baltasar Ibán (4º, 5º y 6º), cuajados y de buenas hechuras. Deslucidos lo dos primeros y bravo y encastado el sexto, premiado con la vuelta al ruedo.

Fernando Robleño, oreja y dos orejas.

Adrián de Torres, dos orejas y saludos tras dos avisos.

Lama de Góngora, silencio tras aviso y oreja.