15ª SAN ISIDRO

El último domingo de Gonzalo de Villa Parro en Las Ventas no defraudó

Leo Valadez cortó una generosa oreja en una meritoria confirmación de alternativa y Torrealta lidió un toro muy bravo.

Momento de la voltereta sufrida por Leo Valadez en el sexto toro

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Los jóvenes de la grada del 6 se llevaron la primera ovación del último domingo del presidente más nefasto de los últimos tiempos en Las Ventas: "Menos alcohol y más educación". Después de lo de las almohadillas reaccionaron con una pancarta que sería acertada de no ser por la voluntad de prohibir. Prohibir el alcohol a golpe de tuit y con una yonkilata en la mano es el resumen de la Tauromaquia actual. La corrida estaba remendada y los que entraron sustituyendo eran más chicos todavía. Y el colmo, el habitual oreja sí, oreja no con la misma petición.

A Leo Valadez no hizo falta preguntarle de dónde era. Su variedad con el capote desde el inicio ya acreditó su origen. Lo intentó todo, desde las gaoneras de recibo hasta una suerte emulando a Joselito en la goyesca que estuvo cerca de costarle un disgusto. El que brilló de verdad fue Alberto Sandoval con la vara. Dos puyazos tremendos que solo calaron en el Madrid de la educación. Inició de rodillas en los medios tras brindar al público y quiso correr la mano con temple. El toro, 'Discreído', fue tan bueno como flojo. Su falta de fuerza condicionó su voluntad de embestir. Lo intentó por los dos pitones el mejicano, pero no consiguió limpiar los muletazos. Los enganchones frustraron su ansia. Con el toro ya rendido consiguió media docena de naturales muy toreros, pero sin ninguna transmisión por la debilidad del toro. La estocada en la suerte contraria fue lo mejor.

Quitó por lopecinas al último de la tarde Valadez e invitó a padrino y testigo a banderillear. Fue el mejor tercio de la tarde. Escribano dejó un soberbio par de dentro afuera enfrente de Ortega Cano, en un burladero del 1, y Valadez le hizo el quite al mismo tiempo que dejó su par al violín. Pusieron Madrid boca abajo. La muleta ya es otra cosa. El toro no decía nada y Valadez tampoco se calentó. En un descuido, el toro se le coló y le pegó una voltereta espantosa. Se quedó varios segundos colgando del pitón, pero aparentemente fue únicamente el porrazo. Una tanda meritoria por el izquierdo después y una gran estocada calentaron el final. En las escuelas taurinas ya se enseña lo de cogida + trapazo = oreja. El presidente, que a estas horas debe estar de camino a Benidorm celebrando su jubilación, concedió el trofeo. Algunas orejas molestan más que un ruedo lleno de almohadillas.

El segundo fue recibido entre protestas por su fea estampa. Un toro para eso, para tirar almohadillas. El Fandi invitó a sus compañeros a poner banderillas y despertó el ánimo de los tendidos, pero tampoco fue un tercio para el recuerdo. Brindó a los que no regalaron su entrada y decidieron venir a Las Ventas, se pegó su carrerita para exhibir sus facultades y en los bajos del tres trató de retener al manso. Estuvo hábil el torero de Granada y le supo esperar. A base de insistir y de colocarse en el sitio correcto pudo contentar a su público. No se lo puso fácil ni el viento ni la afición, que rápido se puso a la contra, pero El Fandi demostró que lleva ya muchos años por encima de los prejuicios. Estuvo muy torero.

Recibió al cuarto con más agilidad que brillantez. Fue efímera la solvencia, porque el toro se hizo el amo en el tercio de varas. Rajó tres capotes: 900 pavos le costó el segundo acto a Fandila. El de Torrealta lo hizo todo con mucho nervio en banderillas y el torero no estuvo fino para colocarlas. En la muleta, una tormenta de casta que anegó el repertorio del torero. La resaca de las almohadillas fue El Fandi con un toro bravo. La puntilla a una semana muy dura para los puretas. Fue bueno el toro hasta para morirse. El mejor de lo que va de feria. Su tarde empezó bien, pero terminó como casi siempre. Mal día para ser de Granada.

Manuel Escribano recibió a su primero de rodillas en la puerta de chiqueros. Se peleó contra el viento solo para poder dejar el capote 'echao'. No había hecho la suerte y ya estaba el 7 erre que erre. Triunfal tarde de 'El Rosco', que dejó varios 'peanuts'. "Mal camino lleváis si queréis seguir aquí", dijo mirando al callejón. Se volvió a compartir el tercio de banderillas entre los tres matadores, pero ya era tiempo de pipas y empezaba el fútbol. Escribano se echó la muleta a la izquierda en los medios para prologar lo suyo, pero ni el toro ni el viento le dejaron poner esa sonrisilla tan particular. Ya con la derecha y en el tercio pudo imponer su ley. Se quedó en el sitio e hizo caso omiso al impertinente cabeceo del toro de la familia Prado. Hizo un esfuerzo mayúsculo para lo que merecía el animal y para lo que demanda Las Ventas un domingo, que es brevedad. Escribano es un excelente profesional y poco se le puede reprochar.

A porta gayola se fue también con el quinto y siguió después con largas cambiadas y verónicas a pies juntos de nulo eco. Se lució en banderillas y dedicó nuevamente su faena a los tendidos. 'Filósofo' fue el toro y un ensayo denso y tosco fue la faena. Escribano dio su máximo, templó y cargó cada muletazo con gusto y mano baja, pero no conectó nunca con el tendido. No hubo ajuste ni tampoco vendió bien lo que estaba haciendo. La estocada viajó trasera, pero fue muy certera. Hubo petición suficiente, pero no era domingo de orejas en el palco. Era domingo de despedida, salvo sorpresa. La de Gonzalo de Villa Parro. 50 años después del rabo de Palomo y del tal Panguas, el adiós de Gonzalo. Al loro, que no estamos tan mal.

Madrid, domingo 22 de mayo de 2022. 15ª de Feria. Dos tercios de plaza (16. 676 espectadores según la empresa)

Cuatro toros de Torrealta y dos de los Hermanos García Jiménez (1º y 5º). Muy justos de presentación y con posibilidades en la muleta, en líneas generales. Bravo el 4º y con mucha clase el 5º. Fueron todos muy protestados de salida.

El Fandi, ovación y silencio.

Manuel Escribano, silencio tras aviso y vuelta al ruedo tras petición.

Leo Valadez, que confirmó alternativa, ovación tras leve petición y oreja.