11ª FERIA DE SAN ISIDRO
La oreja de los 'isidros'
Trofeo en tono menor para Sebastián Castella ante un buen toro de Jandilla
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Madrid y su sensibilidad. La ovación a Juan José Padilla se elevó por los tendidos en reconocimiento a la sinceridad de un torero más allá de polémicas puntuales con esta plaza. El Ciclón de Jerez no quería decir adiós a los ruedos sin aparecer por la Feria de San Isidro.
Su despedida de Madrid comenzó con 'Recoveco', un 'jandilla' astifino como él solo al que Padilla recogió a la verónica en un saludo que remató con una acompasada larga a una mano. Perdió varias veces las manos el toro y se levantaron las primeras protestas en los tendidos. Sebastián Castella dejó su tarjeta de visita en forma de quite por gaoneras. Ajuste y templanza a partes iguales antes de que Padilla firmase un entonado tercio de banderillas. Después, el toro fue puro almíbar en la muleta. Demandaba pulso y colocación. El diestro jerezano comenzó de rodillas la faena pero cuando se incorporó dejó un trasteo breve en el que nunca le cogió ni la distancia ni la altura al toro. Rompió la punta del estoque en su primer ataque toricida para dejar después una estocada tendida.
'Harmonía' fue el segundo toro de Jandilla. Parecía que tampoco le sobraban las fuerzas al animal. Le cuidó mucho Sebastián Castella en los primeros tercios. Unos cuidados que parecieron surtir efecto cuando el toro embistió con ritmo y clase en la muleta del galo. Aún así, el pupilo de Borja Domecq demandaba un pulso que no siempre aplicó el galo. Faena insípida que remató además de un feo bajonazo.
Muy 'jandillón' de hechuras fue el primero del lote de Andrés Roca Rey. Un animal que tomó con brío y empujando la primera vara. Se pensó más la segunda pero de nuevo se arrancó con riñones antes de romper la vara. Por lo que tuvo que entrar por tercera vez al jaco mostrando bravura en este tercio. El peruano prologó su faena de muleta con un inicio que conjugó pases por alto con arrucinas. Algo que no tuvo buenos efectos para el toro. Se apagó como una vela desde la segunda tanda. Muy aplomado el animal y muy a la contra un sector de la plaza con Andrés. Ésto provocó la reacción del resto de los tendidos, que aplaudieron a rabiar una faena intrascendente del joven diestro. La estocada viajó caída.
Tuvo pies de salida el cuarto, que puso en más de un apura a Padilla con el capote. Éste fue otro toro bravo en el caballo. Derribó poderoso en el primer encuentro y, viejo zorro el jerezano, le colocó más en corto para un segundo en el que también se empleó el astado. Muchos capotazos recibió durante un tercio de banderillas en el que solo destacó un último par al violín. Tampoco ayudó un inicio por bajo de Juan José, que hilvanó un trasteo en el que prevalecieron las dudas del torero. Con un pinchazo y una estocada corta muy tendida acabó el último paseíllo de Padilla en Madrid.
Se picó horriblemente al quinto de Castella. Y eso en Las Ventas es pecado capital. El toro embistió con chispa y emoción en los primeros tercios. El torero galo fue fiel a su ya clásico inicio de faena en los medios. Los pases cambiados como marca de la casa. El de Jandilla sacó humillación y emoción en sus embestidas. Y buscó el temple y la ligazón Castella pese a una colocación no cabal. Un parón del toro y el aguante del torero para resolver la tanda gustó hasta la extenuación a la plaza. Después llegó el tan previsible arrimón en las faena del francés y los circulares a granel. La estocada, algo más de media y atravesada, tumbó al toro. La oreja, de 'isidros' de viernes que mañana lo contarán ufanos a sus amigos. Hasta uno de ellos me preguntó si era la primera oreja que se cortaba en la Feria...
El sexto fue el animal más manso del sexteto enviado por Borja Domecq. Un toro que cantó la gallina pronto y buscó el refugio de tablas en chiqueros. Ahí le plantó cara Roca Rey, pero la tendencia a salir desentendido del toro hizo imposible la ligazón en los primeros compases de la faena. Pero a base de insistir y de colocarse en los terrenos del toro para ganarle siempre la acción, el peruano sacó varias tandas en redondo de mérito. La ovación final reconoció el valor seco de Andrés.
Madrid, viernes 18 de mayo de 2018. 11ª de Feria. Lleno de 'No hay billetes'.
Toros de
, bien presentados aunque de desiguales hechuras. Con calidad en su contado poder el primero; manejable pero flojo el segundo; a menos el tercero; encastado el cuarto pero mal lidiado; encastado, noble y bueno el quinto; manso el sexto.
Juan José Padilla, silencio y silencio.
Sebastián Castella, silencio y oreja.
Andrés Roca Rey, palmas y saludos.