El gesto que nunca debes hacer cuando te has hecho una herida: ¿Cómo evitar que se infecte?

En nuestra vida cotidiana es muy común que nos cortemos, y probablemente nos hayamos cortado ya alguna vez con algún tipo de instrumento como puede ser un cuchillo de cocina o una hoja.

Estas rupturas o aberturas en la piel originan heridas. El corte puede ser de distintos grados de profundidad y dependiendo de eso tendremos que curar la herida de una forma o de otra. Por ejemplo, un corte profundo suele afectar los tendones, los músculos, los ligamentos, los nervios o hasta el hueso.

En cambio, los cortes o heridas que no tienen mucha importancia no necesitan tanto tratamiento o curación, puesto que suelen afectar solamente a la zona cutánea más externa. Es normal que en este tipo de cortes se dé un sangrado, aunque de menos cantidad y durante menos tiempo.

Sea cual sea el corte que nos hayamos hecho, siempre tendremos que desinfectar la herida, y como medida general se recomienda presionar levemente la herida para detener el sangrado. Pero este procedimiento no siempre se hace correctamente.

La reacción natural suele ser soplar sobre la herida para aliviar parcialmente el dolor. Un gesto que no se recomienda en absoluto hacer esto. ¿Por qué? A pesar del sentido común que conlleva soplar la herida, esto puede favorecer que la herida se infecte más. Esto se debe a que cuando se sopla, la boca libera muchas bacterias.

Estas bacterias no tienen por qué ser malas, pero no todas las partes del cuerpo (donde se realice el corte o la herida) están preparadas para combatir las infecciones que estas bacterias ocasionan. Los glóbulos blancos forman parte del sistema inmunitario y ayudan al cuerpo a combatir infecciones y otras enfermedades. Por ello, soplar puede ocasionar una reacción adversa en los glóbulos, favoreciendo el incremento de la infección en vez de disminuirlo.

Este insecto lo usan ya algunos hospitales para curar las heridas más graves: disuelve la piel y se la come

Hablando de la piel, en 'Lo que viene' descubrimos un tratamiento que cada vez conocen más profesionales médicos. Se trata de usar las larvas de mosca como alternativa a terapias convencionales. Muy pocas personas saben que hay un insecto capaz de curar algunas heridas complejas con una eficacia cercana al 100%, y Jose Ángel Cuadrado nos ha hablado de la Lucilia Sericata, un pequeño animal -que pesa microgramos- y que, en estos momentos, se está reproduciendo a gran escala en dos instalaciones de última generación en Alemania e Inglaterra. Puedes escuchar cómo funciona todo el procedimiento con estos pequeños animales en el siguiente audio.

Los 7 pasos para una donación efectiva, el documental de Pablo Ráez

Relacionando este tema con el de la salud, en COPE te preguntamos: ¿Has pensado alguna vez en donar? La respuesta más normal suele ser "sí, si a mi me encantaría pero...". En el centro de transfusión de sangre de Málaga saben que "quien dona, repite". En el vídeo a continuación te contamos los siete pasos necesarios para hacer efectiva una donación de médula. ¡Pincha en el vídeo!