¡No la tires! El truco para conservar la carne y que aguante perfecta más días
Es imprescindible una adecuada gestión de la temperatura y el tiempo para una correcta conservación de la carne en nuestros frigoríficos
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La carne española es de excelente calidad. Que la industria cárnica española es una de las de mayor valor del mercado está ampliamente constatado por organismos independientes y valorada en multitud de países que, a pesar de las políticas emprendidas por el ministro de Consumo, Alberto Garzón, siguen apostando por la materia prima que nace y se cría en España.
A pesar de que en multitud de ocasiones nos es muy complicado disfrutar del frescor de algunos alimentos, es cierto que existen cientos de trucos que nos pueden ayudar a conservar esas carnes jugosas para que lleguen a nuestros platos con las mayores calidades. Es por esto por lo que muchos usuarios siguen fieles ante ciertos consejos antes de servir un plato de chuletones de Ávila, vaca gallega o ternera de las comarcas de Alisete y Sanabria de Zamora.
¿Cómo conservar la carne en casa?
Parece evidente, pero es imprescindible una adecuada gestión de la temperatura y el tiempo para una correcta conservación de la carne en nuestros frigoríficos. La conservación de la carne en casa, del tipo que sea, requiere temperaturas de refrigeración muy concretas para evitar la contaminación bacteriana por Salmonella, Listeria o Escherichia coli.
Por este motivo, la temperatura a la que debería mantenerse la nevera sería de unos 4º grados centígrados. En alimentos frescos como es la carne es importante mantener estas condiciones hasta el momento de su consumo, ya que tiene una vida corta y, aunque se mantenga en la nevera, debería cocinarse antes de las 72 horas tras la compra. Además, es de vital importancia proteger la carne del contacto con el aire para evitar contaminaciones.
En general, el redondo, la espaldilla o solomillo del pobre, es decir, las piezas de carne para asar, y que suelen tener como mínimo un peso de un kilo, pueden aguantar en la nevera cuatro o cinco días sin más preparación. Para su conservación, no obstante, es importante retirar la carne de su envase, desechar sus jugos y, sólo después de secarla, envolverla en film de cocina antes de meterla en la nevera.
¿Cuál es el mejor método de tratar la carne envasada en bandeja?
La compra de carnes y productos frescos envasados en bandeja y que se sirven en carnicerías y grandes superficies es otra de las circunstancias típicas por la que deciden apostar la gran mayoría de las familias españolas a la hora de llenar el carrito de la compra.
Son carnes que se venden en unas óptimas condiciones de higiene y que suelen durar más tiempo, aunque es imprescindible que para que se conserven como es debido se haga a bajas temperaturas, ya que se introduce en una atmósfera protectora. Esto quiere decir que el aire que está en contacto con el alimento —responsable de que los alimentes se oxiden y, por tanto, se estropeen— está controlado.
En el caso de la carne en bandeja, se puede mantener en buenas condiciones hasta cuatro días más de lo habitual. Además, la conservación en bandeja impide que los alimentos absorban o desprendan olores en la nevera y evita tener que manipularlos antes de cocinar, lo que minimiza el riesgo de contaminaciones previas.
Este tipo de alimentos también se pueden congelar en el mismo recipiente en el que vienen, y es aconsejable para congelarlos no esperar hasta el último momento de la fecha de caducidad.