Tiempo de Análisis
Paco González: "A día de hoy, el Atlético de Madrid ya no es ni candidato ni favorito, es el campeón"
Paco González, director de Tiempo de Juego, considera que el Atlético de Madrid, a día de hoy, ya es el campeón de Liga tras los últimos resultados.
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Paco González, director de Tiempo de Juego, considera que el Atlético de Madrid ya es el campeón de Liga tras la última jornada donde el club rojiblanco venció al Real Valladolid, el Real Madrid venció en Sevilla y el Barça cayó en Cádiz.
"En el debate este que a veces nos montamos los periodistas de si el Atlético es favorito o candidato o el gran favorito…yo no lo considero ni candidato ni favorito, le considero ya el campeón. Le saca 12 puntos al Barcelona. Es decir. Tendría que perder cuatro partidos, todavía no ha perdido ninguno, y el Barcelona ganarlos todos o perder tres y empatar tres y el Barcelona ganarlos todos. Creo que el Barça se va descartando el solo. Como gane al Madrid sería nueve puntos y un partido pendiente, que es irse a los doce también. A la Real Sociedad le saca un punto, pero tiene dos partidos menos, ósea que si los gana, y tiene pinta de que va a ganarlos, los feos y los bonitos, sería siete sobre el segundo. Está en una puntación extraordinaria porque está en los noventa y muchos, casi en los cien puntos si sigue así, sin perder, equipo menos goleado, segundo equipo máximo goleador… A mí me parece que ya todos los debates sobre si es favorito o candidato es una tontería, es que directamente es, a día de hoy, el campeón. Gana los partidos cuando juega bien y el otro día le tocó jugar feo, fuerte y formal, volvió a ser como John Wayne porque no tenía ni a Joao Félix, ni a Llorente porque los estaba reservando como a Koke para el partido de la Champions ni tenía a Carrasco que es su gran regateador y no se despeinó mucho. De hecho, este año Oblak yo creo que para menos que otras temporadas".
El Atlético cumplió ante el Real Valladolid y ya es líder
La mutación de candidato a favorito la protagoniza un Atlético de Madrid lanzado, que responde a la exigencia de un calendario de locura con máxima fiabilidad en cada una de sus citas y premiando el paso al frente dado por Diego Simeone este curso por el perfil de sus jugadores. Ante el Real Valladolid solventó gracias a la entrada en escena de Marcos Llorente, al que rotó de inicio, y el premio a su apuesta insistente en Thomas Lemar, un encuentro que se torcía y que acabó dando el liderato merecido tras un nuevo tropiezo de la Real Sociedad. Era cuestión de tiempo. Pese a tener dos partidos menos nadie se acerca al momento rojiblanco. El derbi ante el Real Madrid será el examen definitivo. En caso de triunfo y con el Barcelona a doce puntos de distancia, la Liga se pondrá muy a su favor.
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Zidane respira tras ganar al Sevilla
Señalado como el principal culpable de todos los males madridistas, el triunfo del Real Madrid en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán fue una nueva resurrección de un técnico al que el madridismo debe estar eternamente agradecido. Sus jugadores demostraron que dan la cara por él y que, en las grandes citas, son un valor seguro. Lo demostraron en el clásico y ante el Inter de Milán. Sumaron al Sevilla a la lista en un inicio de semana clave para la reacción. Aún sin Sergio Ramos o Dani Carvajal, el conjunto blanco recuperó la fiabilidad en defensa que le guió hacia el título de Liga hace unos meses. Y encontró a Vinicius en la falta de pegada para tomar aire antes de una 'final' frente al Gladbach en la Liga de Campeones y un derbi ante el Atlético que marcar el rumbo en LaLiga Santander.
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Nueva derrota del Barcelona
"El Barcelona necesita la posesión para ganar, nosotros no. Para el Cádiz es un problema". Son palabras de Álvaro Cervera, uno de los grandes vencedores de la duodécima jornada al mando de un equipo recién ascendido que, tras ganar al Real Madrid en su casa, tenía reservado el primer triunfo de local del curso ante el equipo de Ronald Koeman. Hasta un 82% de posesión del Barça tiró por tierra cualquier estudio futbolístico sobre la importancia de tener el balón. No solo le faltó acierto en el remate a un equipo que se desploma en Liga y brilla en Liga de Campeones. Sin tensión ni la concentración que demanda un duelo en la elite, cometiendo dos graves errores que regalaron el partido. Mingueza rematando sobre su portería y provocando el primero tras la parada de Ter Steguen; Lenglet midiendo mal y completando su error con el portero para que Negredo marcase a placer. Los de Koeman se desangran lejos del Camp Nou. Cuatro puntos de quince posibles y apenas cinco goles en cinco encuentros.