El análisis del Cádiz: situación muy delicada

Eibar, Real Oviedo, luego la Copa del Rey en Jaén y el Sporting de Gijón. Son los cuatro partidos que se vienen encima del Cádiz en apenas diez días. Un póker de encuentros en los que devenir el futuro inmediato de un equipo que va cayendo en picado y sin frenos por la Segunda División. De estar cuatro años en la élite del fútbol español, a estar ahora mismo en puestos de descenso a Primera Federación, la maldita y temida Segunda División B de otrora época cadista.

Un momento fatídico y crítico en un equipo que no da pie con bola y una a derechas. Suma ahora mismo cuatro jornadas sin ganar en las que solo ha sido capaz de sumar un pírrico punto ante el Málaga. No sabe aún lo que es ganar como local y es uno de los equipos que más tantos ha encajado de lo que del campeonato. Un desastre a todas luces en el que no se salva nadie. Presidente, entrenador y jugadores, en el orden que sea, todos son culpables de una situación que si no se remedia puede traer consecuencias muy nefastas para todos.

En esta situación, y viendo que Paco López está cambiando cosas, cometiendo fallos y pocos aciertos, es hora de que más que nunca los jugadores den un paso adelante. Analizar uno por uno los más de 20 jugadores que tiene la plantilla del Cádiz refleja que no puede ser realidad que este equipo sea uno de los cuatro peores de la categoría. Resulta sonrojante que jugadores que han sabido rendir en Primera, no el año pasado, estén dando un nivel tan bajo en Segunda División.

Hay futbolistas que en el Cádiz y en otros equipos de Primera han dado un buen nivel y que ahora mismo están a años luz de lo que fueron. Asimismo, la situación invita a pensar que a poco que muchos de estos jugadores mejoren y con cometan errores groseros jornada tras jornada el equipo ganará partidos. O al menos ese es el anhelo y el deseo de una afición más desesperada que nunca.