Recibiendo la Nochebuena con SoHo´s y ostras Mar Conil

En Herrera en COPE provincia de Cádiz hemos tenido la oportunidad de dar la bienvenida a la Nochebuena brindando con SoHo´s un refrescante y ligeramente espumoso spritz elaborado sobre una base de fino de Jerez de Bodegas Sánchez Romate, enriquecido con aromas naturales de limón, hierbabuena y bergamota al que hemos acompañado con Ostras de Mar Conil dando un contraste de sabores que ha cautivado a los asistentes. 

Luis Díez de la Cuadra, Director nacional de Ventas de Bodegas Sánchez Romate ha contado la bonita historia surgida en Nueva York y concretamente en Manhattan que han servido como fuente de inspiración para que este nuevo vino de Jerez salga a la luz. Este fino spritz refrescante y ligeramente espumoso debe su origen al Sherry Cobbler, el famoso cóctel que fue toda una moda en la década de 1830 en Nueva York. Marta King, considerada la primera mujer bartender en la historia de la coctelería en Estados Unidos, contribuyó a la difusión y popularidad de este cóctel tan especial que se vendía en el Niblo's Garden, bar que regentaba en el propio barrio del Soho de Manhattan. De ahí el nombre del nuevo spritz jerezano SoHo´s

Díez también ha destacado que son más de 240 años de buen hacer de Sánche Romate, los vinos y brandies de la casa han atesorado un espíritu abierto, orgullosamente cosmopolita y a la vez íntimamente arraigado a su origen. Sánchez Romate desarrolla una práctica vinícola cuidada hasta el extremo a partir de la tierra blanca de albariza, la luz y el aire de Andalucía occidental, las variedades de uva Palomino, Moscatel y Pedro Ximénez; y un microclima de carácter único.

Alberto Palomar, Director de ventas de MarConil nos explica que las ostras de Marconil se cultivan en las frías aguas del Atlántico que bañan el golfo de Cádiz, a pocos kilómetros del estrecho de Gibraltar, el corredor marino donde confluyen el Océano Atlántico y el Mar Mediterráneo, una zona mundialmente reconocida por la gran calidad de sus aguas y por la Almadraba, arte milenario de pesca de los atunes que migran al mediterráneo.

Palomar nos describe que el cultivo de las ostras se inicia con semillas provenientes de los mejores criadores franceses ubicados en el Golfo de Morbihan y en la cuenca de Marennes-Oléron, zonas mundialmente reconocidas por la calidad de sus ostras.

El emplazamiento de nuestro cultivo, en las frías aguas del Atlántico que bañan el golfo de Cádiz, es el que determina el color y sabor del producto.  Su alimentación consiste en una dieta de plancton marino que ingieren mediante la filtración del agua, llegando a filtrar una media de 189 litros por día.

Las ostras Marconil tienen su propio “terruño”, siendo la calidad de las aguas, de la sal, y la naturaleza del plancton lo que les proporciona sus características especiales y refinadas, gracias a las grandes corrientes a las que se ven sometidas en un entorno tan singular e único en el mundo.