Semana Santa
"Habrá que tomar alguna medida para evitar que los pasos salgan a ruedas en Cádiz"
Fernando Díaz, hermano mayor del Santo Entierro, explica en COPE todo lo sucedido el pasado Sábado Santo con los problemas de la cuadrilla de cargadores
Cádiz - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Situación muy complicada la que se vivió durante el Sábado Santo en Cádiz. Llegados a la Catedral, la hermandad de la Soledad y el Santo Entierro tuvo que volverse a su templo por la falta de fuerzas de la cuadrilla de cargadores, a la que en la misma mañana se habían ausentado muchos que iban a procesionar llevando a la Virgen de la Soledad.
Fernando Díaz, hermano mayor de la cofradía, explica en COPE lo sucedido. "Veo que los problemas van a más y cuando entra en Catedral me acerco a la puerta principal y hablo con el capataz. Veo que los problemas son serios e intentamos dar solución desde la Hermandad. Empezamos a tallar a la gente pues nos cuentan que había ciertos desajustes. Si ordenando las tallas se podía arreglar el problema se iba a intentar».
No obstante, «el reloj corría en nuestra contra. El Santo Entierro debe estar de recogida antes de las diez de la noche porque ya no puede procesionar nadie en la calle el Sábado Santo a esa hora. No llegaba más gente y teníamos poco margen de maniobra. Había que decidir con rapidez. Esperamos diez minutos, vimos que los problemas no se iban a solucionar, y con la cabeza fría pensamos que lo primero era la seguridad de los cargadores. Son personas y podían tener un problema».
La hermandad activó el protocolo de emergencia. «Llamamos a la Policía Local, a la que tengo que agradecer la rapidez con la que actuó, cortó Campo del sur y pudimos regresar por el camino más corto al templo».
Relatada la historia, aún en caliente, es momento para aclaraciones y primeras reflexiones. «Quiero destacar que el regreso a Santa Cruz lo hace la misma cuadrilla que sale de la iglesia con dos o tres retoques mínimos. Y justamente es ese camino de regreso cuando mejor va la Virgen. Creemos que los cargadores se sintieron aliviados, al saber que iban de regreso, quedaba poco tiempo y había que hacer un último esfuerzo para llegar bien a la iglesia».
Problemas en la carga de Cádiz
Denuncia con tristeza que «había gente que estaba comprometida y que no se presentó en la salida. Todos no estaban en el inicio». Y lanza un guante para que lo recoja el universo cofrade. «Espero que esto sirva para hacer un análisis sobre la carga, porque puede empezar a pasar más de lo que pensamos. Es una realidad que faltan cargadores en nuestra ciudad».
Acepta la decisión, aunque fuera dura, porque «habría sido una irresponsabilidad seguir hacia adelante. Toca abrir los ojos y ver que tenemos un problema con la carga, porque no hay cargadores ni relevo generacional».
Fernando Díaz explica que "los cargadores que se ausentaron no son hermanos de la cofradía. Ahora tenemos que sentarnos con los capataces y analizar todo lo sucedido a la hora de tomar decisiones".