Martes Santo en Jerez: la lluvia tampoco quiso perderse el estreno de Bondad y Salvación en Carrera Oficial

Tres nazarenos de la Defensión pasaban bajo el arco de la Pescadería Vieja de vuelta a casa y se toparon, en plaza del Arenal, con el Señor de la Salud de San Rafael camino de la Carrera Oficial. Si se tuviera la intuición suficiente para adivinar las caras que tapaban los antifaces en ese momento quizá se concluiría que, a la descomposición por la decisión tomada en Capuchinos, se sumara comprobar que, bajo un cielo apacible a esa hora de la tarde del Martes Santo, todas las demás cofradías marchaban por sus recorridos felices ante la evidencia de una estabilidad meteorológica nítida en ese momento.

Solo cabía un alivio para ellos: comprobar que su junta de gobierno había tomado la decisión acertada. Pero ello distaba aún cuatro horas de llegar. Con una hora de retraso acordado para todas las que salieran para evitar otras lluvias, las que restaban a la hora del almuerzo, Bondad y Misericordia y Salvación alcanzaban el Palquillo de Aladro y vivían el hito histórico de su primera llegada a Carrera Oficial y más tarde la estación de penitencia en la Catedral. Pero coincidió con un Martes Santo con nuevo estropicio tras lo vivido el día anterior. Y el alivio para quienes comprobaron su acierto significó el marasmo para las otras seis cofradías.

Escucha aquí nuestra transmisión de 'Carrera Oficial' cuando todo hacía pensar que podrían completar sus recorridos finalmente, pese a la predicción existente de aparición de lluvias entrada la noche. En el Santuario de María Auxiliadora, la alegría era desbordante mientras, además, se anunciaba la próxima bendición de la dolorosa de Bondad el 22 de mayo. En la parroquia del Perpetuo Socorro surgía espontánea hasta una 'pataita' por bulerías en una cuadrilla exultante. La Salud de San Rafael no sospechaba que, como Amor y Sacrificio el día antes, también el Señor abrazado a la cruz abría de lucir chubasquero para regresar a casa.

El cortejo de la Clemencia ya estrenaba, bajo un sol muy aplaudido, ese escapulario de terciopelo burdeos con el que han enriquecido el blanco hábito nazareno. Y las dos más clásicas de entre las que decidieron salir a la calle, Amor y Desconsuelo, también se preparaban para hacerse a las calles sin problemas. Pero la llegada a Cristina de este último palio, el que llegaba desde San Mateo como postrero paso en Carrera Oficial, marcó el inicio de los problemas: comenzó a llover. Las primeras cofradías estaban llegando a la Catedral, ya muy poblada con las tres cofradías del Lunes Santo que se quedaron hasta el Domingo de Resurrección.

Bondad y Misericordia y Salvación estaban a salvo hasta que descampara. Clemencia y San Rafael se apresuraron para ampararse también en el primer templo diocesano. Y Amor y el Señor de las Penas reclamaban también sitio mientras se intensificaba el aguacero. Pero la cofradía de San Mateo dejaba atrás a su palio del Desconsuelo para la que era más fácil, ante la imponente extensión que ofrecía en la calle el cortejo de nazareno rojinegros, quedarse en Santo Domingo. Y a esperar, no cabía otra. Pero, una vez se reiniciara el camino hacia los respectivos templos de procedencia no habría llegado aún la tranquilidad.

CLEMENCIA VOLVERÁ EL DOMINGO DE RESURRECCIÓN

Bondad y Misericordia aún debió acogerse en la Victoria en el camino hacia el Santuario. Salvación volvió a San Juan de Letrán, donde por la tarde ya hubo preces entrañables que, en el recuerdo de los Jueves de Pasión de estación en la capilla, contó con la presencia de monseñor José Rico Pavés, el obispo diocesano. En cuanto se pudo, ambas tomaron Lealas hacia arriba y se recogieron con bien tras todo lo ocurrido. No tuvo la misma suerte la Clemencia que, San Benito estaba lejos, intentó acogida al reaparecer las preciputaciones, primero en San José y después en San Marcos. Se suma a las que el Domingo de Pascua regresen a sus casas.

Y apareció el capote con el que salió de la Catedral la Salud de San Rafael directamente hacia El Chicle. Y Amor Y Desconsuelo, partida esta última ya que cada paso quedó en un sitio, llegaron a sus sedes del casco histórico de Jerez. La llegada del Miércoles Santo parece traer ya la deseada estabilidad meteorológica para sus seis cofradías: Soberano Poder desde La Granja, Consuelo del Pelirón, Santa Marta y las Tres Caídas desde sus respectivos templos del casco histórico, la Amargura de calle Medina y el Prendimiento que abrirá las puertas de Santiago. Con el 0% de riesgo generalizado y apenas un 10% de tres a cinco de la tarde, la cosa tiene ya otro color.

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