La Policía Nacional honra a sus héroes caídos en el Día de las Víctimas del Terrorismo

En un emotivo acto celebrado esta mañana en el Centro de Recepción de Visitantes de Córdoba, la Policía Nacional ha rendido homenaje a las 188 miembros del Cuerpo que perdieron la vida en acto de servicio. Entre ellos encontramos a tres cordobeses: Juan Antonio Alba Escalera, Rafael Valdenebro Sotelo y Rafael Gómez Cobacho. A partir de ahora, cada 17 de junio se celebrará este homenaje, que se convierte en el tercer gran evento institucional del Cuerpo en el Día de las Víctimas del Terrorismo.

Hoy, al pasear por el entorno de la Puerta del Puente de Córdoba, se pudo observar a numerosos miembros de la Policía Nacional vestidos con sus trajes de gala. Estos oficiales se reunieron para recibir a las autoridades y participar en un homenaje dedicado a quienes han perdido la vida en defensa de la democracia y la seguridad de España.

Un tributo necesario

Joaquín Vidal, presidente de la Asociación Andaluza de Víctimas del Terrorismo, destacó la importancia de este día: "Ya era hora de que se creara este día porque no podemos olvidar a tantas personas que perdieron la vida por defender la democracia, al igual que no podemos olvidar a todas esas familias que quedaron marcadas de por vida por culpa del terrorismo". Sus palabras resonaron profundamente entre los asistentes, recordando la deuda imperecedera que la sociedad tiene con aquellos que sacrificaron sus vidas en nombre de la paz y la libertad.

Un compromiso con la memoria

El acto de homenaje incluyó una serie de discursos y tributos en los que se destacó el compromiso y la entrega de los oficiales caídos. Las autoridades presentes expresaron su gratitud y reconocimiento a los héroes caídos y a sus familias, quienes han soportado el dolor y la pérdida con una fuerza admirable. Durante el acto se proyectó un vídeo con imágenes de cada una de las 188 personas fallecidas en acto de servicio.

Hacia el futuro

La instauración del Día de las Víctimas del Terrorismo como un evento anual de la Policía Nacional subraya la importancia de recordar y honrar a aquellos que han dado su vida en la lucha contra el terrorismo. Este acto se convierte en una ocasión para reflexionar sobre el costo humano de la seguridad y la protección de la democracia, y para reafirmar el compromiso de la sociedad con la memoria de las víctimas.

Las historias de los héroes cordobeses

Juan Antonio Alba Escalera

Nacido en Córdoba en 1945, ingresó en el Cuerpo de Policía Armada en 1970 y fue destinado a Barcelona. El 8 de octubre de 1975, terroristas del FRAP ametrallaron la fachada del cuartel de la Policía Armada en La Verneda. Juan Antonio, que se encontraba regresando al cuartel junto a otros miembros de dos patrullas policiales, resultó muerto en el tiroteo. Este atentado no solo le costó la vida a él y a uno de sus compañeros, sino que también dejó otras tres personas fallecidas y dos heridas, una de ellas policía.

Rafael Valdenebro Sotelo

Nacido en Montilla (Córdoba) en 1951, ingresó en 1975 en el Cuerpo de Policía Armada y estaba destinado en Santa Cruz de Tenerife en el Grupo de Desactivación de Explosivos. El 24 de febrero de 1978, Rafael murió como consecuencia de la explosión de un artefacto explosivo colocado por el MPAIAC en una sucursal bancaria. Intentaba detectar a distancia algún reloj cuando se produjo el estallido. Las graves heridas sufridas le mantuvieron trece días en el hospital hasta su fallecimiento. Estaba casado y tenía dos hijos pequeños.

Rafael Gómez Cobacho

Nacido en Zanja (Córdoba) en 1948, ingresó en 1972 en el Cuerpo de Policía Armada y estaba destinado en Barcelona. Fue ametrallado desde un coche en marcha mientras prestaba servicio de seguridad en la Comisaría del barrio de San Andrés por miembros del GRAPO. Aunque fue trasladado al hospital en estado gravísimo y sometido a cirugía, falleció tres días después. Estaba casado, tenía un hijo y su esposa estaba embarazada.