Las diferencias del Granada con otros clubes, en la vuelta a la competición

Estamos en una semana importante para el que prácticamente es el único sector deportivo que puede reiniciar su actividad en breve. Se trata de la Liga del Fútbol Profesional, donde, por fortuna, Granada está posicionada en la élite. En teoría, apenas nos separan siete días para iniciar los entrenamientos, de acuerdo con una serie de normas.

Calendario

Apunte este calendario probable y que sería una desescalada:

- 4 de mayo, inicio de los entrenamientos individuales.

- 18 de mayo, comienzo de las sesiones en grupos, que al principio tendrían un número restringido y podrían ir sumando participantes.

- 1 de junio, trabajo de la plantilla de forma común.

En este marco, a mediados de junio se podría reiniciar la liga. Recordemos que el primer partido del Granada sería en casa recibiendo al Getafe.

Parece que el paso inicial no es complejo. Los entrenamientos individuales pudieran permitirse para toda la población desde el 2 de mayo. Distinto es que los futbolistas profesionales lo hagan en la ciudad deportiva de su entidad, espacio que tiene características para mostrarse como seguro.

El resto de los plazos, parecen estar marcados con fechas prudentes, siempre de acuerdo con los protocolos que se han definido. Los escenarios son, como tantos otros que estamos observando estos días, un espacio por explorar, sobre todo por la falta de experiencias, pero también se basan en algunas evidencias y senderos recorridos.

Una nueva realidad para el Granada

Estamos, por ejemplo, ante una pretemporada singular, tras un tiempo de confinamiento. También habría que jugar varios partidos por semana, a lo que equipos como el Granada ya se han enfrentado en situaciones como la convivencia Liga-Copa. Competir a temperaturas elevadas, tampoco es nuevo y se puede amortiguar adaptándose a los horarios menos calurosos y permitiendo, como ya se ha hecho, pausas para la hidratación.

Jugar a puerta cerrada y sin público, es algo con pocos antecedentes y menos de forma continuada. Es un asunto sobre todo psicológico, que tendrá varios puntos de incidencia. Por ejemplo, el factor campo suele beneficiar al equipo local, y esto puede diluirse en parte, lo cual perjudica a los clubes modestos, como el Granada, puesto que la emotividad del espectador contribuye a igualar a contendientes de disparidad económica. Incluso esta entrega de la afición, puede ser mayor en conjuntos menos poderosos, que a falta de un gran capital económico, sí puede disponer de unos seguidores muy entregados.

En este escenario que se está planteando, existen factores generales, pero también particulares. Entre esas particularidades puede estar un asunto capital, el referido a los test, en los que juegan un papel las comunidades autónomas.

Para la plantilla y cuerpo técnico no es un camino sencillo, pero aquí los vientos soplan a favor del Granada. La cohesión y profesionalidad del grupo está demostrada, a lo que habría que sumar, como ya comentamos en su día, una de las mejores ciudades deportivas del fútbol profesional. En este marco puede volver a la competición el equipo rojiblanco.