HUELVA

Sandfire Matsa apuesta por la inclusión de la mujer en la mina

El 22% del empleo directo de MATSA lo ocupan mujeres de las que el 60%  trabajan en áreas operativas.

Redacción COPE Huelva

Huelva - Publicado el

7 min lectura

      
      
             
      

¿Cuál es la situación actual de la minería y cuáles son las principales necesidades en cuanto a recursos humanos en vuestros sectores en ese contexto?

El sector minero se ha convertido en estratégico en Andalucía. En el caso concreto de Sandfire MATSA, nuestras operaciones mineras tienen un impacto global en el PIB de la provincia de Huelva cercano al 5%.

Generamos unos 4.000 puestos de trabajo, entre directos, indirectos e inducidos y priorizamos la contratación de proveedores locales, apoyando así el desarrollo local de la región.

Todos estos datos nos ayudan a dimensionar la contribución de una compañía minera al desarrollo del territorio en el que opera y su papel dinamizador en la generación de riqueza y empleo en la provincia.

Un empleo que se caracteriza por ser empleo de calidad.

Al mismo tiempo, las empresas somos cada vez más conscientes de que tenemos que impulsar también la mejora de la empleabilidad dentro del propio sector minero, para formar así determinados perfiles cualificados que puedan satisfacer las demandas presentes y futuras de la minería en el territorio, que no siempre se corresponden con las que se ofertan o están disponibles a nivel académico.

      
             
      

¿Es necesaria la formación profesional en el sector minero?

En Sandfire MATSA, tenemos claro que queremos seguir avanzando en nuestra visión de llevar a cabo una actividad minera con el foco en las personas y en el apoyo a las comunidades locales y, para ello, es imprescindible la formación.

En los últimos años estamos haciendo un esfuerzo extraordinario en el desarrollo de las competencias profesionales de nuestro equipo, con el convencimiento de que esta inversión repercutirá con creces en su bienestar y en la mejora de nuestras operaciones mineras.

      
             
      

Estamos trabajando, en colaboración con otras empresas del sector y con las instituciones públicas, para impulsar la actualización del marco formativo disponible, a través de nuevos ciclos de formación, proyectos de FP dual y formación para el empleo.

Desde las empresas mineras, creemos firmemente en la importancia de la FP Dual y estamos promoviendo que en nuestro entorno se lleve a cabo una adaptación de la oferta formativa a las necesidades empresariales. La especialización requiere una base sólida que solo da la formación.

Este es un debate permanente que mantenemos con las administraciones públicas, ya que es fundamental alinear educación y formación con las necesidades del sector.

      

¿Qué habilidades son más necesarias en el sector minero metálico - metalúrgico?

Además de las habilidades técnicas que se necesitan para el desempeño de cualquier profesión, hoy en día cobran cada vez más importancia otros factores adicionales, como el desarrollo de competencias profesionales asociadas a cada puesto de trabajo, el desempeño acorde a los valores corporativos de la empresa, el trabajo en equipo, así como otros intangibles que convierten a una personal en un profesional destacado, con mayores oportunidades de empleabilidad en el mercado laboral.

En vuestro sector, ¿qué cambios se anticipan en los perfiles laborales y en la formación de vuestros empleados en los próximos años?

En los últimos años, la demanda de perfiles laborales cada más digitalizados se está convirtiendo en nuestro gran caballo de batalla. Son perfiles alejados de la visión tradicional del sector minero y que, sin embargo, están comenzando a tener un papel destacado en las operaciones mineras, por ejemplo, hablamos del business intelligence, del analista de datos, del mecatrónico, etc. Y es esencial que seamos capaces de atraerlos a este sector.

Las propias empresas mineras han evolucionado con el paso de los años, de ahí que los perfiles profesionales que se necesitan también hayan vivido esta misma evolución.

¿Cómo está contribuyendo en vuestro sector la tecnología y la innovación a una minería más responsable y a un impacto positivo en el desarrollo de las comunidades locales?

La innovación forma parte del ADN de compañías mineras como Sandfire MATSA y en muchas otras, por lo que ya está jugando un papel esencial en el sector. A su vez, existe esa aceptación y valor social en el entorno hacia la actividad minera y, iría más allá, somos un sector atractivo para trabajar. La propia apuesta por la innovación de la compañía despierta ese interés laboral y, al estar nuestras operaciones mineras en zonas rurales, esto abre nuevos horizontes a la población local.

¿Qué tan importantes son las vocaciones STEM y cuál es el actual y futuro papel de la mujer en este sector?

La presencia de la mujer es vital.

 El 50% de la población mundial es mujer y no se puede quedar fuera del sector minero. La actividad minera, es verdad que ha sido considerada durante muchos años un sector exclusivamente masculino, pero los datos actuales nos avalan y la minería sí es un lugar para mujeres en la actualidad. La mujer, por ejemplo, en MATSA ha ido ganando presencia y el empleo femenino directo en este momento ronda, el 22% frente al 9% de la media nacional y esto solo ha sido posible porque los líderes de Sadfire MATSA que sí creemos de verdad que una empresa diversa e inclusiva es una empresa mejor hoy en día.

Nosotros tenemos mujeres en todas las áreas y en todos los departamentos de la compañía incluso en puestos que tradicionalmente han sido por hombres y una cosa muy importante un dato muy importante más del 60% de nuestras mujeres trabajan en áreas operativas y de mantenimiento y el 30% en administración. 

Este dato es muy significativo ya que demuestra que hay un claro cambio de tendencia y también ha sido clave porque hoy en día observamos que hay un apoyo muy grande a las nuevas generaciones por parte de nuestros mineros con más experiencia.

Nuestras trabajadoras cuando hablas con ellas, se sienten 100% integradas por sus compañeros en los distintos relevos de nuestras operaciones y en ese sentido es muy importante destacar que para impulsar la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres los hombres tienen que ser copartícipes de este cambio, porque los hombres son los que han trabajado tradicionalmente.

En muchas posiciones del sector minero, sobre todo en el manejo de maquinaria en interior de mina, no hay escuela y los maestros son los propios compañeros que trabajan en estos puestos. La formación se da dentro de la misma explotación minera. Pero ellos mismos no quieren desaprovechar la oportunidad de contar con el 50% del talento que hay en el mundo, el talento de las mujeres. Aún queda mucho trabajo por hacer, pero estamos en el camino correcto.

Entre las claves de esta progresiva incorporación de la mujer al sector minero se encuentra que cada vez más mujeres participan en procesos de selección de puestos vinculados a la minería. Están perdiendo el miedo y, gracias a la experiencia y la visibilización de nuestras compañeras, este mensaje de apertura está calando poco a poco. El liderazgo femenino, la capacidad de transformación y adaptación de las mujeres a los diferentes entornos son competencias muy apreciadas hoy en día para el proceso de modernización continua en el que estamos inmersos en el sector.

¿Qué acciones se pueden impulsar para lograr la igualdad de oportunidades y el crecimiento inclusivo en un contexto industrial tan exigente como el vuestro?

Tenemos una plantilla joven y estable, que está creando familias en el entorno. Hombres y mujeres perciben el mismo salario por convenio, pero tradicionalmente ha sido la mujer, y no el hombre, la que se acogía a reducciones de jornada para cuidar de los hijos. Esto también está cambiando. En Sandfire MATSA no tenemos brecha por razón de género, gracias a un convenio colectivo fuerte, con múltiples beneficios que permiten a cualquier profesional, sea hombre o mujer, conciliar.

Así, hemos implementado medidas como jornada flexible y teletrabajo, adaptaciones de jornada, posibilidad de cambiar de turno si por razones personales alguien lo necesita, días de asuntos propios y días de libre disposición. Es decir, tenemos un marco que nos permite conciliar, que se ha visto reforzado además por la firma de nuestro Plan de Igualdad y Protocolo LGTBIQ+.

Nuestro reto permanente como sociedad, no solo en minería, es que las mujeres se interesen por afrontar el reto de sumarse a los estudios STEM, es decir, de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, para que las siguientes generaciones se vayan incorporando de manera natural al mercado laboral en base a su cualificación profesional en estos campos. En nuestro caso concreto, también debemos trabajar cada día por acercar la minería como salida profesional a los institutos, centros de formación y universidades de la provincia, para que las más jóvenes puedan formarse y trabajar en un sector que ha sido y es uno de los grandes pilares económicos en la historia de Huelva.