SALUD

La proteína que puede terminar definitivamente con la obesidad

La obesidad inducida por la dieta se ha convertido en una epidemia en todo el mundo, puesto que casi el 40 % de la población adulta padece sobrepeso u obesidad

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Obesidad

Redacción COPE JaénAntonio Agudo

Jaén - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

La obesidad inducida por la dieta, es decir, lo que comemos y cómo lo comemos se ha convertido en una epidemia en todo el mundo, puesto que casi el 40% de la población adulta tiene sobrepeso u obesidad. Una patología que representa un aumento de la mortalidad, así como de la posibilidad de padecer más de un trastorno a la ves. Además, señalan los expertos, padecer obesidad o sobrepeso estaá estrechamente relacionada con el riesgo de desarrollar cáncer.

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Aún así, a día de hoy, todavía se desconocen gran parte de los mecanismos implicados en los efectos perjudiciales de la obesidad, lo que dificulta disponer de estrategias terapéuticas viables o desarrollar nuevos tratamientos para combatirla. Así las cosas los investigadores del grupo IDIBAPS Control traduccional de la enfermedad hepática y el cáncer, dirigido por Mercedes Fernández-Lobato, han identificado la proteína CPEB4 como una “potencial diana terapéutica contra la obesidad”.

En esta investigación, que ya ha sido publicada en la revista Molecular Metabolism, se pone de manifiesto que “una alimentación rica en grasas aumenta la expresión de CPEB4 en el tejido adiposo de humanos y ratones. Esto activa un conjunto de genes implicados en la expansión de las células adiposas, la inflamación y el aumento de la grasa corporal. Además, CPEB4 contribuye a la alteración de la microbiota intestinal asociada a la obesidad, incrementando la proporción de especies bacterianas consideradas patológicas”.

Esto qué quiere decir que:

Sin embargo, la deleción (la mutación genética que consiste en la pérdida de uno o más nucleótidos de la secuencia del ADN.) del gen de CPEB4 en ratones inhibe la diferenciación de los adipocitos. Asimismo, también “reduce la acumulación de lípidos en la cavidad abdominal, la inflamación del tejido adiposo, y el aumento de peso, aunque los animales reciban una dieta rica en grasas. Por último, la ausencia de la proteína normaliza la composición de la microbiota y favorece la presencia de bacterias que protegen a la barrera intestinal”.

"Nuestro trabajo revela la existencia de un circuito regulador del proceso de traducción del ARN a proteínas, dirigido por CPEB4, hasta ahora desconocido", explica Fernández-Lobato. “Esto supone una novedad importante, ya que, a día de hoy, la investigación se centra principalmente en el paso previo, es decir, la síntesis del ARN a partir del ADN. Así, nuestros resultados promueven un cambio de paradigma hacia el control traduccional, que puede abrir nuevas vías de investigación para desarrollar mejores tratamientos contra la obesidad”.

El estudio, firmado por Núria Pell como primera autora, supone un primer paso adelante que permitirá al grupo profundizar y entender los mecanismos que aumentan el riesgo de padecer cáncer de hígado en personas obesas.

Estudio de referencia lo podéis consultar aquí

10.1016/j.molmet.2021.101388