OPINIÓN

Las Divinas Palabras con Ernesto Medina. Hoy: "Aguachirri"

En la sobremesa mi padre contaba el chiste sobre las penurias de la posguerra. El camarero se acerca la cliente. “¿Un café, señor?”. “No, me pone muy nervioso”. “En confianza le diré que no es café-café”. “Precisamente eso es lo que me pone nervioso”. La aguachirle de la pobreza...

Antonio Agudo

Jaén - Publicado el

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... Utilizo el femenino según las directrices de la Real Academia. En Jaén también usamos el vocablo “aguachirri” una corrupción fonética de la palabra que aporta localismo giennense.

Con la política local me sucede como al desdichado cliente. Me pongo muy, muy nervioso. Miento. Antes me ponía nervioso. Ahora la pesadumbre me nubla el entendimiento sumido en la resignación. Aquélla que tanto he criticado entre mis conciudadanos. Pero es que no dejan margen para la esperanza.

El lunes, el pleno del Ayuntamiento de Jaén aprobó la subida de varios tributos municipales. En un intento desesperado de cuadrar la deuda, perdón, las cuentas. Ni siquiera gobierno y oposición fueron capaces de coincidir en cuánta era el aumento porcentual. Empeñados en tirarse los trastos como si ambos no fueran responsables de la ruina. En cierta ocasión, un concejal del PP fue grabado en una reunión reconociendo que algunos trabajadores “habían entrado a dedo y por nuestros cojones” (sic). Habremos de suponer que ha sido una práctica habitual al margen de quién gobernase. La plantilla local ha aumentado desde 2007 en 500 trabajadores. Echemos las cuentas del Gran Capitán. A dos mil euros brutos por cabeza, catorce pagas, ese exceso nos cuesta ¡catorce millones de euros anuales! Me explico la hercúlea tarea, tornada en imposible, de ajustar un presupuesto.

Para nuestros próceres locales otros asuntos son aguachirri que no merecen su atención. Jaén no tendrá conexión con tren a Madrid durante el año 2025. Obras. Podríamos asumir el sacrificio a cambio de próximas conexiones ferroviarias. Pue no. Gratis. El café para otros.

También me ha sorprendido esta semana la presencia de Manuel Chaves, expresidente de la Junta, en Jaén para presentar un libro sobre el PSOE giennense. Condenado por el Tribunal Supremo y absuelto por el Constitucional -habrán oído hablar, dilectos oyentes de la politización de la justicia-, Chaves ha declarado que piensa pedir su reingreso en el Partido Socialista. Un poco descafeinado presidir la presentación de un libro sobre el partido del que fue dado de baja y al que todavía no ha tornado oficialmente. Quizá sea que al respecto no está el asunto para servir todavía café de verdad. El que espero que alguna vez, aunque sólo sea una vez, podamos metafóricamente contar que ponen en nuestra provincia.

Palabras, divinas palabras