¿Está el flamenco herido de muerte?

Arte, cultura, pasión. Todo eso es el flamenco, una disciplina, Patrimonio de la Humanidad, que en Sevilla y en el resto de Andalucía pasa por momentos más que delicados durante estos meses de pandemia.

El coronavirus ha obligado a echar el cierre en los tablaos flamencos. Esa situación ha provocado que tanto tablaos como artistas se queden a cero, sin ingresos.

Unión Flamenca, la Asociación de Artistas Profesionales del Flamenco, ha denunciado que desde su puesta en marcha el pasado mes de abril han recibido muchas consultas de socios que ven cómo no tienen acceso a ayudas. También está ocurriendo que el subsidio que les queda es mínimo (en algunos casos no supera los 70 euros mensuales), padeciendo situaciones económicas paupérrimas y próximas a la indigencia.

La Unión Flamenca tiene claro que “vamos a asistir a un cierre progresivo de muchos establecimientos que no pueden hacer frente a esta crisis y eso se va a traducir en una pobreza generalizada en el sector del famenco”.

Ante esta coyuntura el gabinete jurídico de Unión Flamenca está informando a sus asociados de que, si no tienen derecho a subsidio por desempleo o ERTE, tendrán que hacer uso de otro tipo de ayudas como, por ejemplo, el recientemente aprobado Ingreso Mínimo Vital.

La pandemia también ha puesto al descubierto una realidad. Las condiciones leoninas bajo las que trabajaban muchos de los artistas profesionales del flamenco, sin contratos laborales y cobrando en negro.

Por todo ello Unión Flamenca ha criticado duramente que durante todo este tiempo no se hayan hecho las inspecciones de trabajo pertinentes y que se haya permitido que muchos artistas que trabajan a diario en un escenario estuvieran dados de alta muchas menos horas de las reales y nunca en régimen de artista -sino como camareros o mozos de almacén.

La Unión Flamenca pide a los artistas y entidades que se dedican a este sector que trabajen codo con codo por mejorar sus condiciones y hacerlas mucho más dignas. Además reclaman a las autoridades inspecciones de los negocios.

Se trata de iniciativas con las que propiciar una recuperación de un motor fundamental de la economía de Sevilla, un arte que si no se cuida puede salir herido de muerte de esta pandemia.