El testimonio de Juan, paciente trasplantado de corazón, sobre la espera hasta la llegada de un donante: "¿Abriré los ojos mañana?"

Juan Cruz hace una petición para que nos hagamos donantes de órganos y que otras personas salven sus vidas

Irene Ramos

Sevilla - Publicado el

4 min lectura

      
      
             
      

La espera para un trasplante de corazón es una carrera contrarreloj que marca el día a día de cientos de personas en España. Juan Cruz es un paciente sevillano que lo ha vivido en primera persona y que ha contado en COPE Sevilla que esa incertidumbre es complicada porque "cada día es una montaña rusa de emociones". 

Juan explica que desde que "me comunicaron que estaba en la lista de espera para un trasplante, vivía con una maleta lista para salir corriendo, una maleta que guardaba detrás de la puerta de casa".

La esperanza de recibir la llamada que cambia la vida nunca se pierde. Pero se vive con una mezcla de sentimientos y con "miedo a que el tiempo se ago".

Porque la llamada se puede producir en cualquier momento y mientras los enfermos esperan, pasan por horas de hospital, tratamientos médicos, controles periódicos, conversaciones con otros pacientes que comparten la misma situación, el apoyo incondicional de las familias y amigos... Es el día a día de quienes necesitan un trasplante para poder seguir viviendo.

Hasta que llega esa llamada, que en el caso de Juan se produjo a los siete meses de estar en lista de espera, "a las siete de la tarde en un mes de julio, suena el teléfono y te dicen que hay un corazón para ti, que te esperan en el hospital en dos horas para entrar en quirófano".

Entonces todo pasa muy rápido, porque los tiempos en un trasplante son importantes. Y si todo sale bien tras la operación, "pasas de una vida con limitaciones, con marcapasos, controlando el estrés, sin poder hacer muchas actividades, estando muy malito, a una vida más libre, ya puedo salir a pasear solo".

      
             
      

Y hay un antes y un después también por las noches, porque "cuando estás esperando la noche es complicada, te acuestas muchas veces preguntándote: ¿Abriré los ojos mañana? ¿Tendré que llamar esta noche al 061?"

Hoy, Juan disfruta de una nueva oportunidad. Vive porque otros murieron. Es consciente de que es una "situación chocante", una dura realidad. En ocasiones ha participado en actos donde comparte momentos con las familias de los donantes. Y es complicado, "porque tienes que decirles lo siento y a la vez que darles las gracias por el regalo que me has dado".

La importancia de la donación y las cifras récords en andalucía

La historia de Juan Cruz pone de manifiesto la importancia de la donación de órganos. En España, la tasa de donación es una de las más altas del mundo.

      
             
      

"La donación es un acto de generosidad que puede salvar muchas vidas", asegura Juan. 

"Quiero animar a todos a que se informen sobre la donación y a que expresen su voluntad de donar, yo rogaría que todo el mundo se hiciese donante".

Es un proceso perfectamente organizado, con una maquinaria bien engrasada. Un proceso en el que hasta más de cien personas por ejemplo en el hospital Virgen del Rocío de Sevilla, pueden estar implicadas en el operativo de una donación de órganos y un trasplante. Lo ha explicado Manuela Cid, coordinadora sectorial de donación y trasplantes de Sevilla y Huelva, quien asegura que todo se pone en marcha cuando hay una familia atravesando el delicado momento de despedirse de un familiar.

      

En ese momento, si expresan su deseo de donar, entra en funcionamiento la red de profesionales que activa el protocolo. Y una vez que se tienen los órganos, a su vez se pone en marcha con rapidez la búsqueda del donante, siempre acudiendo a la lista de espera y atendiendo a criterios de prioridad y de gravedad.

De donaciones y de generosidad sabe mucho Andalucía, una región que sigue batiendo su propio récord en número de trasplantes de órganos. Durante 2024, los hospitales andaluces han realizado un 18% más de trasplantes que el año anterior, pasando de los 1.034 de 2023 a un total de 1.222, lo que se convierte en la mayor cifra de trasplantes realizados en un año.

Además, durante el pasado año también se registró un 12,24% más de donantes que en 2023, con 495 donantes de órganos en 2024, frente a los 441 registrados en 2023, y 362 de tejidos frente a los 281 previos.

La consejera de Salud y Consumo, Rocío Hernández señala que “estas cifras son fruto del esfuerzo colectivo de donantes, familias y profesionales sanitarios y sitúan, una vez más, a Andalucía como referencia nacional e internacional en el ámbito de la donación y los trasplantes”.